A 10 años de la Libertadores 2009: “Fui afortunado porque la pelota llegó justo donde yo estaba”
Al cumplirse hoy 10 años de la conquista de la última Copa Libertadores para Estudiantes, el autor de uno de los goles del triunfo 2 a 1 contra Cruzeiro atendió de forma exclusiva a la Red92 y repasó el logro más importante de los últimos 45 años del club Gastón Fernández llegó como un refuerzo […]
Al cumplirse hoy 10 años de la conquista de la última Copa Libertadores para Estudiantes, el autor de uno de los goles del triunfo 2 a 1 contra Cruzeiro atendió de forma exclusiva a la Red92 y repasó el logro más importante de los últimos 45 años del club
Gastón Fernández llegó como un refuerzo de jerarquía en el mercado de pases del invierno del 2008, reclamado y observado por Roberto Sensini.
Venía de salir campeón con San Lorenzo un año atrás y ya había jugado en Racing y River,
Boquita lo quería para acompañar la delantera que se estaba formando con el regreso de Calderón, la llegada de Boselli y suplir las partidas de Lugüercio y Piatti y anteriormente Pavone y Sosa un año antes.
Le costó entrar en el equipo, pero se fue ganando un lugar dentro de los titulares en la campaña de la Copa Sudamericana que tuvo al Pincha llegando a la final con Internacional.
Luego, en 2009, alternó buenos y malos momentos hasta que con la llegada de Alejandro Sabella, quien ya lo tenía visto cuando fue ayudante de Passarella en River formó una dupla letal con Boselli en toda la Libertadores 2009.
Un día como como, pero hace exactamente diez años, la Gata escribió su propio capítulo en la historia del club, entrando en la historia al marcar uno de los dos goles en la Final contra Cruzeiro, en Belo Horizonte, que le permitió al Pincha levantar la cuarta Copa Libertadores de su historia.
En contacto exclusivo con la Red 92 el goleador de aquella noche histórica en el Mineirao revivió los mejores momentos y calificó aquella hazaña como lo mejor que le pasó en su carrera.
- ¿Qué recordás de aquel 15 de julio del 2009?
- Parece mentira cómo pasa el tiempo, pero la verdad es que me acuerdo de todo. La gente te lo recuerda siempre y ya pasaron diez años. Siempre recordar eso implica emoción, nostalgia y hasta el día de hoy la gente nos recuerda eso en cada momento. Hoy te puedo confesar que el día que dejamos en el camino a Nacional en Uruguay y lo dejamos en el camino sentimos que ya habíamos cumplido un objetivo. Lo festejamos con la misma intensidad que el día que logramos la consagración.
- Cruzeiro se puso arriba: ¿cómo lo dieron vuelta en media hora con todo un estadio en contra?
- Ese equipo tenía esa característica. Para muchos, después del empate cero a cero en La Plata era imposible que pudiésemos ganar en Brasil. Pero nos paramos bien y tuvimos ocasiones de gol. Por eso estábamos tranquilos y sabíamos que podíamos ganar en cualquier momento. Hoy te confieso algo: después del gol del empate sentimos un empujón enorme adentro de la cancha y nos dimos cuenta todos que podíamos ganarlo. Ese gol nos dio confianza, seguridad y potenció el hambre que teníamos para ganar ese partido y esa Copa. Esa Libertadores la teníamos entre ceja y ceja.
- ¿Qué te acordás de la jugada del gol?
- Una vez que la pelota se abrió, como delantero tenía la obligación de llegar al área y conectar los centros que llegaban. Fui afortunado porque la pelota me llegó justo donde yo estaba, a media altura, y solo la tuve que empujar.
- ¿Cuándo entendieron que entraron a la historia como Malbernat, Flores o Verón?
- No me creo quien para compararme con Cacho Malbernat o Juan Ramón Verón. Pero estoy orgulloso de haber formado parte de un gran equipo que quedó en la historia del club.
- ¿Tuviste un entrenador mejor que Sabella?
- Sin dudas que fue el más importante porque me enseñó lo que es Estudiantes de La Plata. Pero es sido afortunado por ser dirigido por grandes entrenadores como Becaccece, Vivas o el mismo Milito.
- Estudiantes después de aquella Final jugó la Final del Mundial de Clubes con el Barcelona: ¿con vos eran campeones del mundo?
- La verdad es que me arrepiento de no haber jugado ese partido con el Barcelona. No soy quien para decir que hubiese pasado, pero sí creo que Estudiantes estuvo muy cerca y merecía algo más ese día.