PNC Championship

Acompañado de su hijo, Tiger Woods regresó al golf tras su grave accidente

Lo hizo para participar del PNC Championship, en donde compite junto a Charlie, de 12 años

Tiger Woods es la gran estrella invitada al PNC Championship, un torneo del que participó en 2020, cuando hizo dupla con su hijo, Charlie, quien lo acompaña en esta nueva edición. Curiosamente éste había sido su último campeonato disputado antes del grave accidente automovilístico que sufrió en febrero de este año.

El ex número 1 del mundo y su hijo atrajeron todos los focos al saltar el viernes juntos al campo del Ritz-Carlton Golf Club de Orlando (Florida) para un calentamiento previo al evento: “Fue un día genial. Fue genial volver aquí y estar con mi hijo. Una auténtica gozada”, declaró el estadounidense tras la práctica. “Desafortunadamente ha sido un año duro en el que no he podido jugar. Esta es la segunda o tercera ronda que compartimos pero (me alegro de) poder jugar y tener esta experiencia con él”, afirmó.

Este evento, en el que una veintena de ganadores de torneos de Grand Slam compiten en pareja con un familiar, fue el último que disputó Woods antes de que el pasado febrero se estrellara con su camioneta en las afueras de Los Ángeles (California), manejando casi al doble de la velocidad permitida. En la colisión sufrió múltiples fracturas en la pierna derecha de las que sigue rehabilitándose y que le hicieron temer por una posible amputación.

“Estoy empezando a volver a intentar jugar de nuevo, así que no tengo la resistencia que me gustaría tener”, reconoció y admitió: “El swing no es tan potente, todavía no tengo la velocidad. Es lo que es. La pelota no vuela tan lejos”. En este sentido, prosiguió: “Trabajamos todos los días, incluso los días en los que no me sentía muy bien (...) Aparte de los tres meses que estuve en la cama, no he tomado un día libre”.

El ganador de 82 torneos de PGA, 15 de ellos de Grand Slam, reiteró que se encuentra aún “muy lejos” de pensar en volver a competir con los mejores del circuito: “Todavía tengo un largo camino por recorrer en este proceso de rehabilitación”. Por eso, el PNC Championship ofrece a Woods la posibilidad de un regreso sin las exigencias de los torneos regulares. El evento comprende dos rondas y podrá desplazarse en un carro de golf por el campo, una ayuda que no piensa pedir en un eventual regreso a un torneo regular.

El hijo del astro, Charlie, fue el participante más joven en la historia del torneo y rápidamente se robó el espectáculo logrando un eagle en la primera ronda y luciendo un swing muy similar al de su célebre padre: “Yo no tenía esa velocidad a esa edad. Yo era probablemente un poco más alto que Charlie pero muy delgado”, reconoció Tiger tras la práctica.

Otra pareja participante en esta edición es la número uno del golf femenino, la estadounidense Nelly Korda, junto a su padre, el ex tenista checo Petr Korda. La jugadora mostró también su emoción por competir al lado de Woods. “No voy a mentir. Estoy siendo un poco egoísta, pero es bastante genial”, reconoció antes de pedirle una foto a su ídolo.

Tiger, de 45 años, y Charlie, de 12, firmaron una ronda inicial de 62 golpes, 10 bajo par, para concluir en el quinto lugar en el Ritz-Carlton Golf Club de Orlando (Florida). “Fue genial, fue un día muy divertido”, declaró el ex número uno mundial al terminar su recorrido. “Charlie y yo nos lo pasamos muy bien jugando juntos de nuevo”, se felicitó. “Hubo muchas bromas durante todo el día. Nos gastamos bromas el uno al otro y nos hicimos comentarios por lo bajo”.

En la actual edición, padre e hijo se encuentran igualados con otras cinco parejas a tres golpes de distancia de los líderes, el golfista Stewart Cink y su hijo Reagan. Este domingo se disputa la segunda jornada.