Del tablón al cemento: El último invierno afuera de 1, según Eduardo Abadie

El 28 de agosto de 2005, es decir hace exactamente 14 años, Estudiantes jugó el último partido oficial en la cancha de 1 y 57, en donde volverá a jugar dentro de menos de dos meses y medio. De aquella cancha de tablón al presente estadio de cemente pasaron 14 inviernos, varias canchas y una lucha interminable que llegará a su final el próximo 9 de noviembre.

Aquella tarde plomiza, con un cielo encapotado que fue testigo del gol de Calderón a Navarro Montoya, el partido estuvo cerca de suspenderse: La socia de Estudiantes Olga Yones cayó desde más de quince metros de la tribuna de 55, porque llamativamente se rompió un tablón de una cancha muy cuestionada por el gobierno municipal de aquel momento.

Entre sospechas de boicot y un panorama espeluznante con la hincha tirada en el piso sin signos de vida, el encuentro finalmente se terminó jugando, mientras Yones era trasladada al Hospital San Martín en donde permanecería internada el resto de la semana.

Por ese hecho, además, se terminó clausurando la cancha y Estudiantes nunca más volvió a jugar en 1 y 57.

Asimismo, la rotura del tablón se dio a quince días de las elecciones en el club, que terminó ganando Eduardo Abadie con el 89.11 por ciento de los votos, contra el 11,9 que sacó el doctor Raúl Valente, cuya lista proponía un modelo cancha muy parecida a la que actualmente tiene Gimnasia.

En contacto con la Red 92, el ex presidente del club recordó que “veníamos con algunos problemas judiciales y me tocó asumir a los quince días como presidente. Ha pasado mucho tiempo y se ha luchado mucho. Muchos dirigentes han luchado mucho para que el equipo pueda volver a jugar en 1 y 57”.

Con respecto a la forma en la que vivió como directivo aquel momento, Abadie resaltó que “fuimos a ver a la mujer y tratando de resolver la cuestión. El estadio venía con varias clausuras y eso decantó en la clausura final”.

Abadie, además, fue el presidente que tomó la decisión de hacer de local en la cancha primero, luego en Quilmes, y casi un año después en el estadio Ciudad de La Plata.