Fútbol femenino
La arquera de la selección de Irán, acusada de ser un hombre, se pronuncia y amenaza con demandar a Jordania
Zohreh Koudaei se ha enfrentado anteriormente a cuestionamientos sobre su género y ha sido víctima de acoso debido a su apariencia y rasgos físicos.
Zohreh Koudaei, portera de la selección de fútbol de Irán, ha reaccionado a las recientes acusaciones de Jordania, en las que ponen en duda su género y aseguran que es un hombre.
"Presentaré una demanda contra la Federación de Fútbol de Jordania. Soy una mujer. Esto es intimidación", aseguró la jugadora en declaraciones citadas por el diario turco Hurriyet.
Sus palabras responden a una carta dada a conocer públicamente —fechada el 5 de noviembre— el pasado domingo por el presidente de la Asociación de Fútbol de Jordania (AFJ), Ali al Hussein, en la que se solicita a la Confederación Asiática de Fútbol (AFC) una "verificación de género" de Koudaei, indicando que podría tratarse de un hombre que se hace pasar por mujer.
La petición de la AFJ se remonta al partido que enfrentó a las dos selecciones el 25 de septiembre y que terminó con victoria iraní 4-2 en la tanda de penales, en la que la Koudaei atajó dos disparos. Ese resultado le permitió a la escuadra iraní clasificarse por primera vez en su historia para la Copa Asiática Femenina de la AFC, que se disputará el próximo año en la India.
De acuerdo con el canal Al Arabiya, Zohreh ya se ha enfrentado anteriormente a cuestionamientos sobre su género y se ha defendido ante los medios iraníes. Asimismo, ha expresado tristeza por el acoso del que ha sido víctima debido a su apariencia y rasgos físicos.
Koudaei, de 32 años, ha representado a la selección de su país en numerosas ocasiones y ha vestido la camiseta de varios clubes locales, como el Zob Ahan FC. Este miércoles, Saeid Azari, exdirector ejecutivo de dicho equipo, defendió a la jugadora, llamándola "heroína" y criticó los "ataques e insultos" a los que ha sido sometida en los últimos días.
La arquera ha recibido un apoyo generalizado desde su país. La entrenadora de la selección iraní, Maryam Irandoost, se pronunció poco después de conocerse la carta de la AFJ, negó las acusaciones y sostuvo que esas incriminaciones eran "excusas para no aceptar la derrota".
En cuanto a la polémica sobre el sexo de la jugadora, Irandoost argumentó que "el personal médico ha examinado cuidadosamente a cada intergrante de la selección nacional en términos de hormonas para evitar cualquier problema en este sentido".