Luego de 15 años

Todo listo para el regreso al ring de Mike Tyson

Su última pelea fue en  2005 ante, la victoria será solo por Knock-out  a ocho asaltos de dos minutos y sucederá algo llamativo con el test antidoping.

El mítico boxeador neoyorquino peleará en un combate de exhibición el próximo sábado 28 de noviembre frente a Roy Jones Jr, en el Staples Center de Los Ángeles.

La pelea será a ocho asaltos de dos minutos y para que haya un ganador deberá haber un nocaut, de lo contrario, automáticamente terminará en empate.

Su última pelea fue el 11 de julio de 2005 ante Kevin McBryde, en la que perdió por nocaut técnico entre el sexto y el séptimo round, ya que no se levantó de su esquina para seguir peleando. Ese combate significó el final de la carrera profesional de Iron Mike.

El excampeón de los pesos pesados dejó de lado su dieta vegana y volvió a comer carne para llegar de la mejor manera a la pelea del sábado, que permitirá en los análisis previos la presencia de cannabis en el organismo de los boxeadores.

Mike, con sus 54 años, se subirá nuevamente a un cuadrilátero para enfrentarse a Roy Jones Jr., de 51, el 28 de noviembre en Los Ángeles en una exhibición a ocho rounds que contará con casi todas las medidas de un combate profesional. Más allá de la talla del combate, habrá una salvedad más que llamativa: el control antidoping.

Previo a la pelea, ambos boxeadores se someterán al análisis para evitar el consumo de sustancias prohibidas. No obstante, VADA, el organismo que estará a cargo de las pruebas, contemplará la presencia en el organismo de cannabis. Por lo tanto, Iron Mike y su rival pondrán consumir marihuana y no serán sancionados.

Cabe destacar que desde hace ya varios años que Tyson lidera un proyecto de cultivo en California, donde su consumo es legal, y es dueño de 16 hectáreas de tierra fértil, a 60 kilómetros al suroeste del Parque Nacional Death Valley, en California City, que utiliza para plantar cannabis y llevar a cabo un nuevo negocio en su país.

La contienda entre ambos se desarrollará el próximo sábado a puertas cerradas en el Staples Center, la cancha de Los Angeles Lakers, y será transmitido por el sistema pay per view.