Indignante confesión
Una víctima de la represión en Brasil reveló: "Los policías se sacaban selfies con nuestras radiografías"
También narró que "si no había gente del Consulado" en la sala de atención médica del Maracaná, "probablemente también íbamos a cobrar ahí adentro” junto a otros 8 hinchas argentinos
Eugenio, un argentino que vive en Río de Janeiro y estuvo presente en la noche de ayer en el Estadio Maracaná mientras la policía reprimía ciegamente a los hinchas albicelestes, realizó una brutal confesión sobre el accionar de las fuerzas de seguridad en los momentos donde atendían a los heridos.
Eugenio narró: "Entramos tranquilos. Estábamos lo más bien hasta que arrancó un tumulto y entró un cordón policial que en vez de separar para los dos lados y hacer un punto medio, empezó reventar a palazos”. "En mi caso, me caí y me di la cabeza contra uno de los parantes. De ahí no me acuerdo más nada”.
“Cuando me levanto adentro del hospital en el Maracaná, yo nunca salí del Maracaná, tenía las manos esposadas, llenas de sangre, la cabeza y los ojos llenos de sangre”. En esa sala estaba detenido “en carácter de demorado”, junto a otros 8 chicos.
En este marco, Eugenio contó que "los mismos policías que los reconocemos en los videos se sacaban fotos con las radiografías y selfies con nosotros como trofeo de guerra”. Y sentenció: “Ellos estaban contentos y sentían que eran héroes. Gracias a las personas del Consulado que estaban ahí, si no había gente del Consulado, probablemente también íbamos a cobrar ahí adentro”.
Eugenio y el resto de los detenidos pudieron abandonar el Maracaná a la madrugada después de haber pagado una multa de 200 reales.
Respecto a la violenta situación, la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) emitió un comunicado en el que afirmó que “la organización y planificación del partido fue realizada cuidadosa y estratégicamente por la CBF, en conjunto y en constante diálogo con todos los órganos públicos competentes, especialmente la Policía Militar del Estado de Río de Janeiro”.
Además, aclaró que el hecho de que haya aficionados mixtos “siempre ha sido con conocimiento de la Policía Militar de Río de Janeiro y otras autoridades públicas, como ocurre en las Eliminatorias, en el Mundial, en la Copa América y otras competiciones”. Asimismo destacó que “otros partidos entre Brasil y Argentina, incluso con mayor atractivo, como la semifinal de la Copa América 2019, también se jugaron con afición mixta”.
Finalmente, la CBF destacó que los planes de acción y seguridad “fueron aprobados sin reservas ni recomendaciones por parte de las autoridades de seguridad pública (Policía Militar de RJ, SEPOL, Ministerio Público, Cancha de Fanáticos, Guardia Municipal, CET-RIO, Subprefectura, Concesionaria del Maracaná, SEOP, etc.)"