TERROR EN EL AIRE

Avión estadounidense atacado en Haití: la violencia en Puerto Príncipe obliga a un aterrizaje de emergencia en República Dominicana

Un vuelo de Spirit Airlines fue desviado tras ser atacado mientras aterrizaba en la capital haitiana, dejando un tripulante herido. La crisis de seguridad en Haití se agrava bajo el control de bandas armadas.

Un vuelo de la aerolínea estadounidense Spirit Airlines vivió momentos de tensión este lunes cuando fue atacado a tiros al aterrizar en Puerto Príncipe, Haití.

La situación obligó a los pilotos a desviar la aeronave hacia Santiago, en República Dominicana, para garantizar la seguridad de los pasajeros y la tripulación. Uno de los tripulantes resultó herido, aunque solo de manera leve, según confirmó la compañía en un comunicado.

La situación en Puerto Príncipe se ha vuelto cada vez más peligrosa con la presencia de bandas armadas que imponen el control en la ciudad. El mismo día del ataque, Alix Didier Fils-Aime asumió el cargo de primer ministro en medio de un clima de virtual paro armado.

Las bandas, pertenecientes a la coalición Vivre Ensemble y lideradas por el expolicía Jimmy Cherizier, alias ‘Barbecue’, han cerrado escuelas, bancos y comercios, sumiendo la ciudad en un estado de parálisis y miedo.

Un escenario desolador

En las calles de Puerto Príncipe, el flujo de personas y vehículos es mínimo, mientras que los disparos son constantes en varias zonas. Cherizier anunció a través de redes sociales que la “batalla empezará de nuevo”, instando a la población a quedarse en casa si no es estrictamente necesario salir. El control de las bandas armadas ha convertido a la capital haitiana en una ciudad fantasma.

Haití: en medio de una crisis política y de seguridad

El país atraviesa una crisis política marcada por tensiones entre el nuevo primer ministro y el Consejo Presidencial de Transición, lo que ha llevado a la destitución de Garry Conille. La violencia no ha disminuido a pesar del apoyo de la Misión Multinacional de Seguridad liderada por Kenia y respaldada por la ONU, que ha registrado al menos 1223 muertes y 522 heridos entre julio y septiembre de este año debido a enfrentamientos.