MEDIO ORIENTE

Biden llegó a su primera gira por Medio Oriente con la agenda cargada

Abordará temáticas como las aspiraciones nucleares de Irán más las extrañas negociaciones por petróleo con Arabia Saudita, además del conflicto palestino-israelí

Joe Biden, el presidente estadouniden­se, llegó ayer a Israel, más precisamente a Tel Aviv, para empezar su gira por Medio Oriente. El avión presidencial Air Force One aterrizó por la tarde en el aeropuerto internacional Ben Gurión, donde Biden fue recibido por el presidente Isaac Herzog, el primer ministro Yair Lapid y el primer ministro alterno Naftali Bennett.

Lapid, quien llegó al cargo hace dos semanas, afirmó que las conversaciones con Biden “se enfocarán primordialmente en el tema de Irán”. Israel insiste en que hará lo que sea necesario para contener las ambiciones nucleares iraníes, y se opone firmemente a la restauración del acuerdo nuclear de 2015 que alivió las sanciones contra Teherán. Biden tiene además previsto juntarse hoy con el jefe de la oposición y expremier Benjamin Netanyahu.

Por otro lado, el viernes se reunirá con Abbas, presidente palestino, en la ciudad de Belén, en la parte de Cisjordania ocupada por Israel, pero no se espera ningún gran anuncio para revivir el proceso de paz. Los vínculos de Washington con los palestinos se tensaron en mayo con la muerte de la destacada periodista Shireen Abu Akleh, cuando cubría una incursión del Ejército israelí en la Cisjordania ocupada, y todo indica que la bala era de esa fuerza.

Fuera de Israel

Biden hará luego un vuelo directo sin precedentes entre el Estado judío y la ultraconservadora monarquía del golfo Arabia Saudita, que no reconoce a Israel.

Ese viaje es considerado como parte del esfuerzo por estabilizar los mercados petroleros, sacudidos por la guerra en Ucrania, al acercarse a un país que durante décadas fue aliado estratégico de Estados Unidos y un importante abastecedor de crudo.

Desde Tel Aviv esperan que esa visita también sea el inicio de sus relaciones diplomáticas con Arabia Saudita. Con ayuda estadounidense, Israel amplió su alcance regional en 2020 al formalizar las relaciones con tres nuevos países árabes: Emiratos Árabes Unidos, Bahréin y Marruecos, que se suman a los acuerdos de paz de 1994 con Jordania y de 1979 con Egipto. Si bien no se espera que Arabia Saudita reconozca al Estado judío en el futuro inmediato, un funcionario israelí indicó ayer que la visita de Biden es un paso importante. Cuando era candidato a la presidencia, el mandatario dijo que buscaría convertir al reino en una nación “paria” por sus abusos contra los derechos humanos.