Nuevo Orden Mundial
De África al Caribe, ¿Por qué flamean banderas rusas en medio de la guerra con Ucrania?
¿Qué está pasando en Haití o Mali? ¿Qué fenómeno está sucediendo a nivel global para ver esas imágenes y qué relación tienen entre sí?
Podríamos empezar diciendo que Mali, quizás sea el origen de todo esto que está sucediendo, pero no sería del todo correcto, porque es como echarle la culpa al dominado y no al dominador. Resulta que este país ubicado en el Sahel, se convirtió en portada de los diarios del mundo este año, por ordenarle a los franceses que se retiren de su país y además presentar una denuncia contra su antigua metrópoli. Los franceses, que desde el 2013 estaban presentes en Mali, fueron denunciados por haber mantenido una connivencia con los grupos extremistas del norte del país. Obviamente, todo esto a espaldas del país.
El desencanto
En 2012, Mali le pidió ayuda a París cuando se vio desbordada por los yihadistas del norte. Esto significa que, más allá de los procesos independentistas que sufrieron, Mali seguía manteniendo buenas relaciones con los colonizadores como Francia, por eso, enterarse que los franceses ayudaban a los yihadistas fue un mazazo para el pueblo, que manifestó automáticamente su descontento para con los ahora invasores franceses.
Del otro lado de África
Mientras una Junta Militar Nacionalista tomaba el poder en Mali, al sur de Sahel, en otro rincón de África, nacía una alianza militar en la República Centroafricana y Rusia, con un fin principal: combatir a los señores de la guerra que controlaban casi la mitad del territorio nacional de la república. Por eso, en 2020, Rusia envió el polémico grupo de mercenarios llamado “Wagner”.
A finales de 2021, el Gobierno de la República Centroafricana había recuperado el control del 90% del territorio del país y, además, eliminó a decenas de señores de la guerra. Desde ese momento, los rusos pasaron a ser amados en el país que ambos liberaron y los franceses, que llevaban largos años en el país, tuvieron que retirarse nuevamente.
Estos resultados en la República Centroafricana, hicieron que en Mali se diera cuenta lo que acontecía y también decidieron llamar a los “Wagner” en 2021, pero con los franceses dentro del país. Por eso, la guerra de Ucrania y la coyuntura política, hicieron que los franceses casi huyan del lugar.
El turno de Burkina Faso
Hace tan sólo unas semanas, en Burkina Faso tomó el poder otra Junta Militar Nacionalista y les exigieron a los franceses retirarse de su país. En el primer desfile público organizado después de que se fueran, ondearon otra vez banderas rusas. Muchísimos países acusaron a Rusia estar detrás de este golpe, pero sin entender lo que realmente está sucediendo: África no quiere más a Francia en su continente.
Rusia fue sólo una excusa
El sentimiento anti francés, nada tiene que ver con un intervencionismo ruso ni mucho menos. Las banderas rusas fueron para mostrar que “El enemigo de mi enemigo, es mi amigo”, y Francia está enfrentada a Rusia por la guerra en Ucrania.
La cruzada llega a Latinoamérica
De Sahel, cruzamos a Las Antillas y llegamos a Haití, un país que está totalmente hundido en un tremendo caos político y social, donde buena parte del territorio ya está totalmente controlado por bandas armadas y siendo la autoridad estatal, meramente simbólica.
Hace unas semanas, el Gobierno pidió ayuda y una intervención militar extranjera. A esto, y sin perder el tiempo, respondió Estados Unidos, quien ya hice tres intervenciones en el país, la última en 2004.
El mensaje es el mismo, pero no quieren lo mismo
Fruto de las violaciones cometidas por cascos azules de Naciones Unidas, durante el peor momento del país, la resistencia civil a la intervención extranjera es lógica. El pedido estadounidense, ante la ONU y para intervenir militarmente en Haití, fue la causa de la aparición de banderas rusas en la población civil como un ícono, y además como pedido de ayuda para que vete el posible ingreso de marines al país.