POLÍTICA

Día clave: Estados Unidos elige entre Donald Trump y Joe Biden

La mayoría de las encuestas pronostican una victoria del candidato opositor, el exvicepresidente Joe Biden, y su compañera de fórmula, la senadora Kamala Harris.

Tras una votación anticipada récord, millones de estadounidenses se movilizarán este martes para elegir presidente, renovar toda la Cámara baja del Congreso, un tercio del Senado y las legislaturas de la mayoría de los estados, en medio de un fuerte clima de polarización política, de la peor crisis económica en décadas y con las cifras epidemiológicas de la pandemia aún sin control.

La mayoría de las encuestas pronostican una victoria del candidato opositor, el exvicepresidente Joe Biden, y su compañera de fórmula, la senadora Kamala Harris, tanto por el voto popular como en el Colegio Electoral, que es el que vale legalmente.

Sin embargo, los sondeos se equivocaron hace cuatro años y, por eso, el presidente y candidato a la reelección, Donald Trump, sostiene que repetirá la sorpresa de 2016.

No obstante, estas elecciones tienen muchos condimentos nuevos: fue la campaña más cara de la historia de Estados Unidos; todo indica que por primera vez en la historia más gente habrá votado -por correo o presencialmente- antes del día de las elecciones que durante los comicios propiamente dichos; y el propio presidente agitó el fantasma de un fraude al punto de generar temores declarados de la oposición de una crisis poselectoral.

El efecto de la pandemia

A esto se suma la inédita combinación de una pandemia que mató a más de 231.000 personas y profundizó la polarización entre un oficialismo que no la considera la prioridad política y una oposición que exige un cambio de rumbo, y una crisis económica que frenó el período de crecimiento más largo de la historia del país e inauguró una recesión, aún pese a algunos signos de recuperación.

En general, cuando un presidente busca su reelección, los comicios se convierten en una suerte de referéndum sobre su gestión. Pero esta vez, dado este complejo y distintivo contexto, el referéndum podría ampliar su alcance a los aliados más visibles de la Casa Blanca y al partido oficialista en general.