CORONAVIRUS
El coronavirus tendría como efecto una repentina sordera
La sordera se suma al listado de secuelas poco frecuentes del COVID-19 por un caso detectado en Inglaterra.
Un paciente inglés sufrió una repentina y definitiva sordera luego de haber salido de alta por coronavirus. Es el primer caso reportado en la revista británica BMJ Case Reports. Los médicos aclaran que se trata de un síntoma “muy extraño” dentro de la amplia lista de efectos potenciales del COVID-19.
“Pese a la considerable documentación sobre el virus SARS-CoV-2 y los diversos síntomas asociados, hay una falta de debate sobre la relación entre el COVID-19 y la audición”, advierten Foteini Stefania Koumpa, Cillian Forde y Joseph Manjaly, autoras y autores de la publicación.
El equipo sugiere realizar tests en los hospitales, incluso en cuidados intensivos, para aplicar en caso necesario un tratamiento a base de esteroides.
El caso reportado en Inglaterra
Se trata de un paciente que tuvo coronavirus y perdió repentinamente la audición en un oído luego salir de terapia intensiva, un cuadro que también se notificó en otros casos, aseguraron investigadores del University College London.
“Estuvo intubado durante 30 días y su ingreso se complicó aún más por émbolos pulmonares bilaterales, neumonía asociada al respirador, hipertensión pulmonar y anemia”, detalla la publicación médica.
Como tratamiento, recibió remdesivir, esteroides intravenosos e intercambio de plasma y mejoró clínicamente. “Una semana después de la extubación y la transferencia fuera de la Unidad de Terapia Intensiva, notó tinnitus (silbido) en el lado izquierdo y pérdida auditiva de aparición repentina. No tenía antecedentes de hipoacusia ni patología auditiva”, indicaron los profesionales a cargo del caso.
“La pérdida auditiva neurosensorial es un tema de investigación en curso en el campo de la otorrinolaringología con preguntas centradas en la vía óptima de administración de esteroides para el tratamiento”, señalaron.
En el artículo difundido, recordaron que el primer caso en que se mencionó la pérdida auditiva neurosensorial en un paciente con SARS-Cov-2 positivo fue en Tailandia en abril de este año, y desde entonces solo se publicaron cuatro artículos relacionados con la hipoacusia.
“Los dos casos en los que se observó hipoacusia neurosensorial de nueva aparición no tenían problemas otológicos previos y no se encontró ninguna otra causalidad”, sostuvieron.
Los investigadores aseguraron que a pesar del bajo número de estudios, "es importante considerar la posibilidad de una relación entre el COVID-19 y la pérdida auditiva” debido a que los estudios histopatológicos de estos pacientes no “han mostrado pérdida de células ciliadas y células de soporte del órgano de Corti (órgano del oído medio)” lo que sugiere que la sordera puede estar relacionada “con vías de estrés celular”.