CIERE DE URNAS A LAS 15

Elecciones en Francia: se define el balotaje entre Macron y Le Pen

Según los últimos sondeos, el presidente de centro, se impondría a su rival de extrema derecha con una ventaja menor que en 2017, cuando le ganó con un 66,1% de votos.

Se define una elección clave para Europa: Francia elige en un ajustado balotaje para el período 2022-2027 entre la reelección de Emmanuel Macron o la candidata de extrema derecha Marine Le Pen. Para las 8 de la mañana de Argentina, ya votaron ambos y los primeros resultados estarán después de las 15 (20, hora local).

En la primera vuelta, Macron se impuso con un 27%, con 9,7 millones de votos, sobre Le Pen, quien termino con un 23%, poco más de 8 millones de electores. Apenas un 73% del padrón se acercó a las urnas, por lo que ambos apostaron por una mayor participación.

La abstención se situó en el 26,31% en la primera vuelta. El actual balotaje puede batir el récord de votos en blanco o nulos que muchos franceses escogieron en 2017 para expresar su rechazo a elegir entre los dos finalistas.

Le Pen podría convertirse en la primera mujer presidenta, luego de haberse presentado en 2012 y 2017, mientras que Macron, en el primero en ser reelegido desde el conservador Jacques Chirac (1995-2007).

Tanto el exmandatario de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva, como Alberto Fernández expresaron su apoyo a Macron durante la campaña. "Los falsos nacionalismos que se expresan en las extremas derechas, no son otra cosa que rémoras de un tiempo cargado de discriminación y odio", subrayó el Presidente.

Según los últimos sondeos, publicados el viernes, el candidato de "La República en Marcha" se impondría a su rival de la "Agrupación Nacional" (RN) con una ventaja menor que en 2017, cuando le ganó con un 66,1% de votos.

La heredera del Frente Nacional propone inscribir la "prioridad nacional" en la Constitución, para excluir a los extranjeros de las ayudas sociales, y aboga por abandonar el mando integrado de la OTAN y reducir las competencias de la UE.

El mandatario saliente aboga en cambio por "más Europa", ya sea en materia económica, social o de defensa, y recuperar su impulso reformista y liberal, con su propuesta de retrasar la edad de jubilación de 62 a 65 años.