El pueblo iraní se revela
En medio de los funerales de dos menores, Irán vivió otra ola de protestas
Cientos de personas se concentraron en la ciudad de Izeh, en la provincia de Juzestán, para enterrar a Kian Pirfalak, de 9 años, y Sepehr Maghsudi, de 14. La ola manifestaciones y protestas antigubernamentales, tuvo un nuevo episodio luego de los funerales.
Cientos de personas se concentraron en la ciudad de Izeh, en la provincia de Juzestán, para enterrar a los dos niños. Según imágenes difundidas por la agencia de prensa iraní Isna.
La madre de Kian, el más pequeños (9), acusó a las fuerzas de seguridad de haber matado a su hijo el miércoles, en un video difundido por el medio digital 1500tasvir y el IHR. "Miembros de las fuerzas del orden civil mataron a mi hijo. Es lo que sucedió", declaró la madre, que recriminó a los medios estatales por "mentir" al afirmar que el niño murió en un ataque "terrorista" en el cual perecieron siete personas.
El gobernador de Juzestán, Sadegh Jalilian, citado por la agencia estatal Fars, dijo que "elementos" extranjeros estaban detrás de ese presunto ataque.
También murió en Izeh el adolescente Sepehr Maghsudi, de 14 años
"Kian Pirfalak y Sepehr Maghsudi forman parte de la lista de al menos 56 menores de edad muertos por las fuerzas de seguridad iraníes en la represión de la revolución de 2022", afirmó Jadi Ghaemi, director del Centro de Derechos Humanos de Irán, con sede en Nueva York.
Los funerales detonaron la nueva jornada de protestas, con episodios violentos, que dan continuidad a una de las manifestaciones de descontento más firmes y sostenidas desde el triunfo de la Revolución Islámica en 1979.
Un grupo de manifestantes incendió la casa natal del ayatollah Ruholá Jomeini, fundador de la República Islámica, en la provincia occidental de Markazi. Una multitud jubilosa desfiló frente a la vivienda en llamas del clérigo fallecido en 1989.