Sin poder regresar

En Punta del Este hay unos 200 barcos argentinos que no pueden volver al país por una restricción del ministerio de Salud

Más de 80 barcos fueron despachados desde puertos argentinos por la Prefectura Naval, si bien bajo la advertencia de que no podrían regresar por la falta de un “corredor seguro”.

Todo barco particular fue despachado en la Argentina con el dato de que posiblemente no pueda retornar. “Se les informa por parte de esta autoridad marítima [Prefectura Naval Argentina] que previo regreso a la Argentina deberá prever las condiciones en las que se encuentra el país”, dice un documento, a modo de declaración jurada, que los dueños de las embarcaciones deben firmar cuando abandonan las aguas nacionales, además del papeleo que completan todos los turistas para egresar.

Responsables de la autoridad marítima nacional dejan trascender que, pese a la falta de corredores seguros, hoy se está trabajando en la posibilidad de habilitar alguno. Pero, ya hacia mediados de enero y con la temporada en su pico turístico, no hay confirmaciones de ningún tipo.

Durante los trámites del despacho de una embarcación en una dependencia de Prefectura Naval en la zona norte de la provincia de Buenos Aires, en cambio, deslizaron que habría otras razones además de la cuestión del corredor sanitario. 

Algunos propietarios de barcos inidcan que esta situación es producto de una medida política para desalentar la salida de los barcos hacia el exterior.

El enojo de los dueños de las embarcaciones amarradas en Punta del Este aumenta a medida que avanza la temporada y sus fechas de regreso se asoman. Es que, una vez que terminen sus vacaciones, deberán volver a sus hogares en otro medio de transporte y dejar su barco amarrado en aguas uruguayas. Esto no solo implica no poder navegar en su ciudad de residencia, sino también el costo dolarizado de los gastos extras de amarra y del sueldo del marinero que debe quedarse en el puerto.

Unos doscientos dueños de los barcos argentinos que están amarrados en el puerto de Punta del Este confía en que, sobre el final de la temporada, este problema se solucione.