Francia renacionalizó su empresa eléctrica EDF

El Ejecutivo francés confirmó lo que ya había trascendido hace algunas semanas, la compañía francesa de electricidad, EDF, será rápidamente renacionalizada en su totalidad mediante una operación que apunta a que el Estado controle el 100 por ciento de la empresa. 

Hoy, la parte pública asciende al 83,9 por ciento de EDF, el 1,5 lo tienen los empleados y el resto está en manos privadas.

La llamada "Oferta Pública de Compra" de la empresa representa una inversion de 9,7 mil millones de euros.

El Ministro francés de Economía, Bruno Le Maire, precisó que la renacionalización de EDF deberá estar terminada de "aquí a septiembre para que la compañía de suministros eléctricos esté en condiciones de aplicar el programa nuevo nuclear y desplegar los dispositivos de las energías renovables".

La decisión traduce tanto el momento crítico que se vive en el ámbito de los suministros eléctricos, las dificultades por las cuales atraviesa EDF y que le impiden estar a la altura de su misión como un cambio de orientación profundo por parte de un gobierno de claro perfil liberal.

El precio actual de EDF es otro dato de su situación: en 2005, el entonces Primer Ministro Dominique de Villepin decidió introducir la compañía en la bolsa de valores por un monto de 32 euros por cada acción. 17 años más tarde, el Ejecutivo propondrá la acción a 12 euros.

EDF poco a poco, se fue quedando en el camino sin ser capaz de asumir ni siquiera los objetivos que le fueron fijando para su desarrollo.

La construcción de un nuevo modelo de reactor, el EPR, lleva empantanada desde hace 10 años con un costo que se multiplicó por cuatro en la última década. 

Este contexto alejó a EDF del ambicioso camino que le fijó Macron: por un lado, la construcción de otras seis centrales nucleares, por el otro, el desarrollo de un nuevo tipo de reactor, EPR2, así como la ampliación de los dispositivos de energía solar y eólica.