Inundaciones en California: las Celebridades obligados a dejar sus mansiones

Las impresionantes lluvias que azotan desde hace varios días a California, donde varias tormentas del tipo "ciclón bomba" causaron la muerte de 14 personas, llevaron a evacuar muchas zonas en las que viven actores famosos y celebridades como el príncipe Harry y su esposa Meghan Markle, especialmente la localidad de Montecito.

"Las tormentas invernales causaron la muerte de 14 californianos, o sea más que los incendios forestales de los últimos dos años", dijo en un comunicado la oficina del gobernador del estado, Gavin Newsom. "Nos esperan varios días de mal tiempo", añadió la nota en la que se insta a la gente a estar "hipervigilante".

En Paso Robles, una pequeña localidad entre Los Ángeles y San Francisco, un niño de 5 años desapareció tras ser arrastrado el lunes por la corriente, informaron medios locales citando a la oficina del sheriff. La región espera lluvias intensas, tormentas y vientos muy fuertes para hoy martes, según el Servicio Meteorológico Nacional (NWS).

Ante ese panorama, las autoridades de Montecito, un paraíso habitado por 9.000 personas, entre ellas figuras del espectáculo, celebridades, empresarios y políticos ubicado a 90 minutos de Los Ángeles, instaron a abandonar la zona con un mensaje contundente: "íVáyanse ya! Esta es una situación que evoluciona rápidamente. Preste mucha atención a las alertas de emergencia", dijo el departamento de bomberos en su sitio web.

Es que esta localidad llena de multimillonarias propiedades es especialmente vulnerable a los deslizamientos de tierra. Está al pie de una cadena montañosa que fue escenario de un incendio hace cinco años que arrasó centenares de kilómetros cuadrados que despojaron las laderas de la vegetación que normalmente mantiene el suelo firme.

Entre los famosos afectados figura la animadora de televisión Ellen DeGeneres, que publicó un video en Twitter de un arroyo de agua marrón y embravecida. "Es una locura", dijo a sus seguidores. "El arroyo que está junto a nuestra casa nunca fluye. Está probablemente a unos nueve pies (2,7 metros) de altura, y va a subir otros dos pies (más de medio metro)". La conductora debió ser evacuada por el temporal en Montecito.

No estaba claro cuántos de los residentes del pueblo, entre los que también se encuentran Larry David, Gwyneth Paltrow, Katy Perry y Rob Lowe, atendieron la orden de evacuar., pero las autoridades descuentan que lo habían hecho para preservar sus vidas.

La actriz Jennifer Aniston y la presentadora de televisión Oprah Winfrey, entre otras, poseen en Montecito casas valoradas en millones de dólares.

Los portavoces del duque y la duquesa de Sussex no respondieron a la solicitud de comentarios. Sin embargo, rumores aseguran que el príncipe Harry y su esposa ya habrían abandonado la locación.

Se esperaba que la zona recibiera hasta 200 milímetros de lluvia entre hoy y mañana. En los últimos 30 días, Montecito recibió lluvias "muy por encima de nuestra media anual", dijeron los bomberos en Twitter.

La policía montó barricadas para impedir el acceso a la ciudad, donde varias carreteras estaban completamente inundadas, constató un periodista de la agencia AFP.

Esa zona no es la única en la que se ordenaron evacuaciones. En el condado de Santa Cruz, cerca de San Francisco, más de 30.000 residentes también fueron ordenados a salir de allí.

Varias zonas padecieron precipitaciones cercanas al récord en los últimos días. Los suelos están completamente anegados y el Servicio Meteorológico ha emitido avisos de inundación para gran parte de California. Unos 220.000 hogares estaban sin electricidad este martes, según el sitio especializado PowerOutage.

Aunque es difícil establecer una relación directa entre las tormentas y el cambio climático, los científicos dicen que el calentamiento del planeta aumenta la frecuencia e intensidad de los fenómenos meteorológicos extremos.

La tormenta de la semana pasada dejó a decenas de miles de personas sin electricidad, provocó fuertes inundaciones y desencadenó deslizamientos de tierra. Se produjo pocos días después de otro diluvio de lluvia en Nochevieja.