OTAN

"La OTAN merece ser calificada como organización criminal"

La Alianza del Atlántico Norte representa la mayor amenaza para la humanidad, afirma el experto en el campo de los derechos humanos, Alfred de Zayas, en su artículo para el 'Global Times'.

"Las fuerzas de la OTAN han cometido crímenes de guerra y contra la humanidad desde la década de 1990, pero lo que importa hoy es que la opinión pública mundial reconozca a la OTAN como una amenaza para la paz y la seguridad de la humanidad. Sus constantes provocaciones suponen el mayor peligro para nuestra supervivencia como especie", afirmó Zayas, quien trabajó para el Consejo de DDHH de la ONU como experto independiente para la promoción de un orden internacional democrático y equitativo.

En su origen, la OTAN tenía un propósito legítimo de seguridad, explica. Una consecuencia del tratado de la Alianza fue la existencia de la Organización del Pacto de Varsovia liderada por la URSS (1955-1991) y la amenaza de destrucción mutua asegurada mediante armas nucleares disuadió a ambos bloques de atacarse mutuamente. La situación cambió en 1989, recordó, cuando el dirigente soviético Mijaíl Gorbachov retiró las fuerzas soviéticas de Europa Central y Oriental y el presidente de Estados Unidos, George H.W. Bush, le prometió que la OTAN no se expandiría hacia el este.

Alfred de Zayas señaló que la decisión de Clinton de expansión de la OTAN hacia el este, incumpliendo promesas vinculantes, fue calificada por George F. Kennan de "error fatal" en un artículo publicado en The New York Times el 5 de febrero de 1997.

En sus palabras, después de 1997, la Alianza del Atlántico Norte pasó gradualmente de ser una alianza "defensiva" a convertirse en un jugador geopolítico importante, subyugando al resto del mundo. Ya en la década de 1990, los países de la OTAN participaron en la destrucción de la integridad territorial de Yugoslavia, y en 1999, sin el acuerdo con el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, bombardearon Yugoslavia, violando así el Artículo 2(4) de la Carta de la ONU, declaró el experto en el campo de los derechos humanos.

La guerra agresiva de la OTAN en 1999 fue un ensayo general de lo que ocurriría después, destacó Alfred de Zayas. De acuerdo con el historiador, las fuerzas de la Alianza supuso graves crímenes de guerra, como el bombardeo de centros civiles y el uso de armas de efectos inherentemente indiscriminados, como el uranio empobrecido y las bombas de racimo. Yugoslavia fue solo el preámbulo de una serie de ataques contra Afganistán, Irak, Libia, Siria y otros países, recalcó.

"Aunque la OTAN merece ser calificada como organización criminal, lo que es crucial no es llevar a cabo juicios por crímenes de guerra, sino neutralizar la amenaza", concluyó.

Zayas consideró que las violaciones de los Convenios de Ginebra y de La Haya por parte de las fuerzas de la OTAN están tan bien documentadas que cualquier tribunal con la jurisdicción adecuada podría juzgar a miembros de las fuerzas de la Alianza Atlántica.