Fieles
La peregrinación islámica a La Meca comienza limitada por la pandemia
La peregrinación anual a la ceremonia del Hajj empezó este miércoles en la localidad saudita de La Meca marcada por las limitaciones impuestas por el covid.
Centenares de fieles realizaron hoy de forma ordenada, con tapabocas y distancia social de por medio el ritual del Tawaf al Qudum en el patio de la Gran Mezquita, que consiste en dar siete vueltas en sentido antihorario alrededor de la Kaaba -el edificio cúbico que guarda la piedra negra que los musulmanes creen se desprendió del paraíso- para dar inicio al Hajj, uno de los cinco pilares del islam.
Con señales en el suelo, la distancia entre los devotos -vestidos con túnicas blancas los hombres y negras las mujeres- contrastó con las aglomeraciones usuales en el lugar más sagrado de la religión musulmana, que en 2019 recibió a más de 2 millones de peregrinos de todo el mundo.
Tras el inicio del brote de la Covid-19, las autoridades sauditas decidieron en febrero limitar la celebración del Hajj a un millar de residentes en Arabia Saudita, 30% de nacionales y 70% de extranjeros de entre 20 y 50 años.
El Ministerio de Salud saudita seleccionó y capacitó a los candidatos, que tuvieron que cumplir en las últimas dos semanas una cuarentena obligatoria en hoteles de los alrededores.
Antes de ser transportados a la Gran Mezquita, las autoridades sanitarias les hicieron el test de coronavirus para evitar contagios durante el evento religioso.
Según la agencia de noticias oficial saudita SPA, a cada grupo de 50 peregrinos se les asignó un "líder" para garantizar que cumplan las medidas preventivas, como llevar siempre puesto el tapabocas.