25 HERIDOS

Murieron al menos 10 personas tras una avalancha de nieve en el norte de Pakistán

Las operaciones de rescate fueron complicadas dado que la tragedia ocurrió en un lugar muy aislado con difícil acceso.

Murieron al menos diez personas y otras 25 resultaron heridas este sábado a causa de una avalancha provocada por las fuertes lluvias que golpean la zona norteña paquistaní de Gilgit-Baltistán (GB). Las autoridades locales informaron que las operaciones de rescate están siendo muy complicadas porque la tragedia ocurrió en un lugar muy aislado con difícil acceso. 

"Un grupo de unos 35 nómadas que regresaban de Cachemira estaba acampando cerca de un barranco", declaró a la AFP Subah Jan, un funcionario de los servicios de rescate. "Fueron alcanzados por una avalancha que se produjo tarde en la noche y que dejó al menos diez muertos", añadió. 

Las víctimas, pertenecientes a la comunidad bakarewal, transportaban su ganado como cada año desde la provincia de Punjab a los pastos verdes que tiene el distrito de Astore, donde ocurrieron los hechos. "Llovía a primera hora de la mañana cuando una avalancha golpeó la zona donde se habían alojado los nómadas", dijo a EFE el portavoz del gobierno de la zona, Fateh Ullah, quien confirmó que tres mujeres y seis hombres habían fallecido y al menos 25 personas resultaron heridas. 

El funcionario también informó que temen que la avalancha haya destruido más campamentos de los nómadas, por lo que en el lugar continúa trabajando la policía, los equipos de rescate y oficiales del Ejército. En tanto, una responsable de la policía, Muhamad Riaz, explico que los habitantes del lugar son quienes están a cargo de las operaciones de rescate por la dificultad para acceder a la zona. 

Las precipitaciones dejan cada año importantes daños humanos y materiales en países del sur de Asia, especialmente durante el período del monzón, entre junio y septiembre. En los últimos años, como consecuencia del cambio climático, la inundaciones producidas en las épocas monzónicas son cada vez más graves. En el verano pasado hubo miles de víctimas y cuantiosas pérdidas, sobre todo en agricultura, al punto de que hubo necesidad de recurrir a la ayuda internacional para evitar una hambruna.