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No todo Marruecos puede festejar por el Mundial: manifestación y represión

La manifestación en Rabat, la capital marroquí, contó con la participación de movimientos sociales, políticos y sindicales contra la "vida cara y la represión", organizada por grupos de izquierda en un momento en que crece la indignación en el país. Participaron miles de personas

La marcha fue convocada principalmente por el Frente Social Marroquí (FSM), que agrupa a partidos de izquierda y organizaciones sindicales, bajo el lema "Todos contra la carestía de la vida, la opresión y la represión". La convocatoria fue una de las más importantes de los últimos meses en el país, según la agencia de noticias AFP.

El FSM defendió la necesidad de "protestar contra lo que está viviendo el pueblo marroquí en términos de precios exorbitantes, represión sistemática y opresión social global", recogió la agencia de noticias Europa Press. "El pueblo quiere que bajen los precios, el pueblo quiere hacer caer el despotismo y la corrupción", gritaron los manifestantes en contra de la administración del Reino de Marruecos, conducido por el rey Mohamed VI y el primer ministro Aziz Ajanuch.

"Hemos venido a protestar contra un gobierno que representa el matrimonio entre el dinero y el poder y que apoya un capitalismo monopolista", declaró Younés Ferachine, coordinador nacional del FSM.

Otras organizaciones como el sindicato Confederación Democrática del Trabajo (CDT) ya habían realizado manifestaciones contra la carestía de la vida, como la del pasado 13 de noviembre, convocada para protestar contra "el desprecio del Gobierno marroquí a las reivindicaciones de la clase obrera y de la población en general".

Con una inflación del 7,1% en octubre, Marruecos registró "unos niveles de pobreza y vulnerabilidad como en 2014", a causa de la pandemia de Covid-19 y la subida de los precios, indicó un informe reciente del Alto Comisionado de Planificación marroquí.

Las recurrentes sequías también fueron señaladas por medios como Reuters y Al Jazeera como parte del contexto crítico que vive el país del norte de África.

Además de la "vida cara", los manifestantes denunciaron "cualquier forma de represión" contra la oposición y la libertad de expresión, en un país donde encarcelaron a varios periodistas y militantes opuestos al ejecutivo actual.