Se tensa la cuerda
Nueva visita estadounidense a Taiwán
La senadora republicana Marsha Blackburn mantuvo un encuentro con la presidenta Tsai Ing Wen.
Luego de la polémica y controversial visita de la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, a Taiwán a principios de mes, en las últimas horas un nuevo miembro del gobierno estadounidense viajó hacia el mencionado país con el objetivo de seguir tendiendo lazos. En este caso, se trata de la senadora republicana Marsha Blackburn, quién se reunió en la jornada pasada con la presidenta Tsai Ing Wen.
“Nunca me doblegaré ante el Partido Comunista chino. Seguiré apoyando a los taiwaneses y su derecho a la libertad y la democracia. Xi Jinping no me asusta. Estados Unidos sigue firme en la defensa de la libertad alrededor del mundo y no tolerará ningún esfuerzo para minar ni a nuestro país ni a nuestros aliados”, remarcó a través de sus redes la senadora de Estados Unidos. Llegada a Taiwán en la noche del último jueves, está previsto que la gira dure tres días. Sumado a esto, también declaró que todo su país está con Taiwán, al mismo tiempo que le agradeció a Ing Wen por “oponerse” al gobierno de China. “Hacer el largo viaje hacia Taiwán es una muestra del fuerte apoyo del Congreso de Estados Unidos. Esperamos trabajar mano a mano con Estados Unidos y otras democracias afines para salvaguardar la paz y la estabilidad en la región del Indo-Pacífico”, sostuvo por su parte la presidenta. También, agregó que las visitas de altos funcionarios de su aliado refuerzan su “determinación” de defenderse.
Durante esta semana, Taiwán también recibió la visita del gobernador estadounidense de Indiana, Eric Holcomb, quién se hizo presente en el territorio por un lapso de cuatro días, reuniéndose tanto con la mandataria como con representantes del sector de los semiconductores. Su visita estuvo enmarcada dentro de una comitiva de la cual también participó el senador demócrata Edward Markey. Desde Washington entienden que Beijing está ejerciendo una creciente “presión autoritaria” hacia un territorio el cuál consideran propio. En la última década al menos 150 congresistas de Estados Unidos viajaron de forma oficial a Taiwán, 34 de ellos durante la actual administración de Joe Biden. Todos estos encuentros son vistos como una clara amenaza por parte del gobierno chino, que entiende que puede ver perjudicada su soberanía.
Vale remarcar, que el último jueves Taiwán anunció un presupuesto de defensa récord, de 13.700 millones de dólares para el próximo año, lo que representa un aumento del 13% en relación con el actual año. Sin lugar a dudas, la visita de Nancy Pelosi recrudeció la tensión entre las potencias mundiales y es por esto que ante cualquier evento en la isla desde ambos lados salen a reprochar y recriminar el accionar. Como consecuencia de dicha presencia, China decidió suspender la cooperación en materia de repatriación de inmigrantes ilegales, la asistencia jurídica en materia penal y la lucha contra los delitos transnacionales. También paralizó su cooperación antidroga, además de cancelar llamadas telefónicas y reuniones entre los líderes de defensa de ambos países.