CLEMENCIA
Redujeron la sentencia de 110 a 10 años de prisión al camionero cubano condenado por un accidente en Estados Unidos
Alrededor de 5 millones de personas habían firmado una petición en línea solicitando clemencia para Aguilera-Mederos.
El gobernador de Colorado, Jared Polis, le acortó la pena de 110 a 10 años de prisión al camionero cubano que había sido condenado tras haberse quedado sin frenos y haber matado a cuatro personas.
De esta manera, su pena fue reducida drásticamente, luego de que se realizaran varios pedidos de clemencia para el hombre, ya que la cantidad de años que se le habían dictado en la sentencia original habían causado indignación.
La decisión de este jueves sobre la sentencia de Rogel Aguilera-Mederos fue una de las varias conmutaciones e indultos de fin de año emitidos por Polis.
Esta medida se tomó días después de que un juez programara una audiencia para el próximo mes para reconsiderar la sentencia a petición del fiscal del distrito, que había planeado pedir que se redujera a 20 o 30 años.
El juez Bruce Jones impuso la sentencia de 110 años el 13 de diciembre tras considerar que era el término mínimo obligatorio establecido por la ley estatal, señalando que no habría sido su elección.
Luego de esta sentencia, más de 5 millones de personas firmaron una petición en línea solicitando clemencia para Aguilera-Mederos.
El inmigrante cubano Rogel Aguilera-Mederos, padre de un niño de 5 años, fue declarado culpable de cuatro cargos de homicidio vehicular y otros 23 cargos por el choque del camión que conducía contra otros autos en la ruta Interestatal 70 en Denver, Colorado, en abril de 2019. El hecho causó la muerte de cuatro personas.
El camionero conducía un semirremolque a 136 kilómetros por hora cuando fallaron los frenos. Según declaró ante la justicia, trató de detener el vehículo fuera del camino, pero otro camión se hallaba detenido. Entonces, cerró los ojos y se preparó “para morir”. El camión finalmente provocó un choque de 28 autos y camiones.
Sin embargo, el fallo consideró que el conductor no usó la rampa de emergencias que hubiera podido evitar la tragedia. Para la justicia, el joven cubano tomó “decisiones terribles e imprudentes” a pesar de “no tener la intención de hacer daño”.