PANDEMIA
Reino Unido: Las discotecas solo permitirán el ingreso de clientes vacunados contra el coronavirus
La medida forma parte de las nuevas disposiciones anunciadas por el gobierno de Boris Johnson.
En las últimas horas, el gobierno británico levantó la mayoría de las restricciones por Covid-19, en plena ola de contagios. A partir del 19 de julio dejó de ser obligatorio usar barbijo, mantener la distancia social o respetar el límite de aforo en reuniones en interiores o al aire libre. Esta decisión fue recibida con alarma y escepticismo entre la comunidad científica internacional.
A su vez, Boris Johnson anunció que será necesario tener las dos dosis de las vacunas para entrar a las discotecas y clubes nocturnos de Inglaterra. “A finales de septiembre, cuando todos los mayores de 18 años hayan tenido la oportunidad de recibir la doble vacuna, estamos planeando hacer que la vacunación completa sea la condición de entrada a los clubes nocturnos y otros lugares donde se reúnen grandes multitudes”, afirmó en una rueda de prensa. “Ya no bastará con mostrar el resultado negativo de una prueba”, precisó.
Cerrados desde marzo de 2020, los locales nocturnos pudieron reabrir sus puertas en Inglaterra este lunes, en el que la prensa y algunos diputados conservadores británicos bautizaron como “freedom day” o día de la libertad.
Última etapa de un progresivo desconfinamiento, inicialmente prevista para el 21 de junio y que fue cancelada debido al fuerte aumento de los casos debido a la variante Delta del coronavirus, esta permite además a teatros y estadios recibir ahora aforo completo.
Se suprimió también la obligación de llevar tapaboca en lugares cerrados y mantener la distancia física, aunque Johnson llamó a la población a actuar con “prudencia”. Su gobierno había aconsejado a clubes nocturnos y otro locales que pidieran una prueba negativa de covid-19 o un certificado de vacunación para entrar. Pero el primer día vio a multitud de jóvenes volver a las pistas de baile desde la medianoche sin hacerlo.
Pese al éxito de su campaña de vacunación, que ha inoculado completamente a casi el 70% de la población adulta, el Reino Unido tiene aún un 35% de personas entre 18 y 30 años sin vacunar y esta medida va dirigida a incentivarlos para que lo hagan.
Los lugares cerrados y propicios al acercamiento, donde además se consume alcohol, son los que que más favorecen los contagios, que actualmente rondan los 50.000 diarios en el Reino Unido y siguen subiendo, señaló el consejero médico del gobierno Jonathan Van-Tam, según publicó AFP.
“No quiero tener que volver a cerrar clubes nocturnos”, advirtió Johnson, como sucedió en Holanda, o regiones como Cataluña, desatando el enojo de los empresarios de uno de los sectores económicos más golpeados por la pandemia.
A principios de mayo, cerca de 3000 personas sin tapabocas llenaron un boliche de Liverpool con la aprobación de las autoridades. Se trató de un evento como prueba piloto para organizar la futura reapertura de los locales de ocio.
Para poder entrar, los asistentes tuvieron que haber dado negativo en un test de antígenos de COVID-19 en las 24 horas previas a la fiesta en el club Circus, en el interior del cual quedaban abolidas las normas de distancia social.
El experimento, bautizado por los organizadores como The First Dance, “El primer baile”, incluyó las actuaciones de Sven Väth, The Blessed Madonna y Jayda G. Algo similar pasó el sábado por la noche. El DJ británico Norman Cook, conocido como Fatboy Slim, actuó delante de miles de personas en Liverpool.
“Qué noche tan festiva. La mejor prueba piloto gubernamental en la que he estado involucrado. Muchas gracias a Circus y a todos los involucrados. Si estuviste allí anoche, hacete la prueba de coronavirus la semana que viene. Los resultados podrían ayudar a que más eventos comiencen a funcionar cuanto antes”, escribió Fatboy Slim, a través de su cuenta de Instagram.
Según la BBC, se esperaban durante el viernes y el sábado unos 6 mil asistentes, que finalmente pudieron disfrutar del evento en Bramley-Moore Dock sin tener que cumplir con las medidas de distanciamiento social y el uso del tapabocas, aunque cumpliendo con el requisito de presentar una prueba de coronavirus con resultado negativo.
El experto en salud pública que dirige la investigación, Iain Buchan, le contó a BBC que durante el estudio se iban a utilizar monitores de dióxido de carbono para detectar “bolsas de aire viciado”.
Los asistentes se sometieron durante la semana previa al evento a una nueva prueba de PCR para acreditar que se haya controlado adecuadamente la propagación del virus. Según los informes, solo 15 personas dieron positivo en COVID-19 luego de la fiesta.