GUERRA
Rusia avanza en Ucrania en medio del temor de una crisis energética en Europa
En el Viejo Continente, la posible caída de la provisión de gas amenaza con sumir al continente en una debacle energética histórica.
Rusia ordenó este sábado a sus fuerzas "intensificar la actividad" militar en Ucrania, mientras crece el temor a una crisis energética por los idas y vueltas entre Moscú y las empresas extranjeras que intervienen en el mantenimiento del gasoducto que lleva gas a Europa.
El ministro de Defensa ruso, Serguei Shoigu, instó a intensificar las operaciones, especialmente en la región del Donbass en el este de Ucrania, "para impedir que Kiev bombardee la infraestructura civil", informó la cartera a través de un comunicado reproducido por la agencia de noticias Sputnik.
Por su parte, el operador ucraniano de energía nuclear acusó al Kremlin de disparar misiles a las regiones de Nikopol y Dnipro desde la central ocupada de Zaporiyia, en el sur del país, donde hay instalados unos 500 soldados rusos.
La mayor central eléctrica de Ucrania fue tomada por las fuerzas rusas en marzo, poco después de la invasión iniciada el 24 de febrero.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, en su mensaje diario, dio cuenta en las últimas horas de los ataques en Dnipro (este), Kremenchuk (cerca de Kiev) y la región de Kiev.
Este sábado, el gigante energético ruso Gazprom comunicó que había pedido al grupo Siemens los documentos que confirman la posibilidad de devolver una turbina reparada en Canadá, que sirve para el funcionamiento del gasoducto Nord Stream.
A pesar de las sanciones, Canadá accedió a conceder a Siemens lo que describió como un permiso limitado en el tiempo y revocable para permitir la reparación y el regreso de la pieza.
Pero Gazprom afirma que no recibió ninguna garantía de que sea devuelta.
El gigante ruso dice que esta pieza es esencial para el funcionamiento del gasoducto que provee suministro directamente a Alemania.
Gazprom inició el lunes pasado 10 días de mantenimiento en el gasoducto Nord Stream 1, y la Unión Europea (UE) espera que se restablezca el suministro, esencial para varios países del bloque.