Taiwán preparó sus refugios antiaéreos: desde estaciones de metro hasta centros comerciales

Taiwán preparó sus refugios antiaéreos en la medida que aumentó la tensión con China y la invasión rusa de Ucrania generaba nuevos temores sobre la posibilidad de un ataque chino a la isla democrática, informó la agencia Reuters.

China considera a Taiwán su territorio y aumentó la actividad militar en el aire y los mares a su alrededor en tanto que Taiwán prometió defenderse y fortaleció sus defensas como prioridad, con ejercicios militares y de defensa civil regulares.

Los preparativos incluyeron la designación de refugios donde las personas puedan refugiarse si los misiles chinos comienzan a volar, no en búnkeres construidos especialmente, sino en espacios subterráneos como estacionamientos, el sistema de metro y centros comerciales que también están bajo tierra.

La capital de Taipei tiene más de 4.600 refugios de este tipo que pueden albergar a unos 12 millones de personas, más de cuatro veces su población.

Harmony Wu, de 18 años, se sorprendió al saber que una zona comercial subterránea donde ella y otros jóvenes estaban ensayando algunos pasos de baile recientemente se convertiría en un refugio antiaéreo en caso de guerra.

Pero ella dijo que podía entender por qué: "Tener refugio es muy necesario. No sabemos cuándo podría venir una guerra y ellos deben mantenernos a salvo. La guerra es brutal. Nunca la hemos experimentado, así que no estamos preparados", dijo Wu en el lugar cerca de una estación de metro de Taipei.

Los funcionarios de Taipei actualizaron su base de datos de refugios designados, poniendo su paradero en una aplicación de teléfono inteligente y lanzando una campaña de carteles y redes sociales para asegurarse de que las personas sepan cómo encontrar el más cercano.

Las entradas de los refugios están marcadas con una etiqueta amarilla, del tamaño de una hoja de papel A4, con el número máximo de personas que puede llevar.

Un alto funcionario de la oficina de la ciudad a cargo de los refugios dijo que los acontecimientos en Europa habían renovado el sentido de urgencia.