Guerra rusoucraniana

Trump habló con Putin y dijo que no vislumbra una "paz inmediata" en Ucrania

Putin descarta una cumbre con su par ucraniano, Volodimir Zelenski, quien calificó de "ultimátums" inaceptables las condiciones impuestas por Rusia. El Papa León XIV pidió un "gesto a favor de la paz".

El presidente estadounidense Donald Trump advirtió este miércoles que no habrá una "paz inmediata" en Ucrania tras hablar con su par ruso Vladimir Putin, quien le habría comentado que va a responder al reciente ataque ucraniano con drones. Previamente Putin había rechazado un posible alto el fuego en Ucrania y también descartó una cumbre con el líder ucraniano, Volodimir Zelenski, quien calificó de "ultimátums" inaceptables las condiciones impuestas por Rusia en la última negociación celebrada entre delegados de ambos países en Estambul. Por su parte el Papa León XIV instó a Putin a hacer un "gesto a favor de la paz".

Al dar cuenta de una conversación telefónica que duró una hora y cuarto, Trump afirmó en su red Truth Social que Putin dijo "muy enérgicamente que tendrá que responder al reciente ataque" de los ucranianos. El presidente estadounidense no mencionó su reciente malestar con Putin, sobre quien dijo a finales de mayo que se había vuelto "completamente loco" por los ataques rusos contra Ucrania.

"Fue una buena conversación, pero no una conversación que lleve a la paz inmediata" en Ucrania, agregó el magnate republicano. Según Trump, los dos líderes hablaron "del ataque a los aviones rusos perpetrado por Ucrania, así como de otros ataques que han estado llevando a cabo ambas partes". El pasado fin de semana Ucrania lanzó un ataque complejo con drones explosivos contra varios aeródromos rusos que le permitió destruir o causar daños a numerosos aviones militares.

"Kiev organiza atentados terroristas"

Más temprano Putin había acusado a Ucrania de estar detrás de las explosiones que hicieron descarrilar tres convoyes en dos regiones rusas fronterizas con Ucrania. Esos ataques dejaron siete muertos y 113 heridos. "A día de hoy, en medio de grandes pérdidas, replegándose en todos los sectores del frente, en un intento de amedrentar a Rusia, la cúpula de Kiev ha pasado a organizar atentados terroristas", dijo Putin durante una reunión con el gobierno transmitida en directo por la televisión.

Al respecto, Putin subrayó que "la decisión sobre tales crímenes, por supuesto, se tomó en Ucrania a nivel político", en referencia no sólo al Ejército o los servicios secretos, sino al gobierno ucraniano. "Todos los crímenes que fueron cometidos contra civiles, entre ellos mujeres y niños, en víspera de una nueva ronda de negociaciones de paz propuesta por nosotros en Estambul estaban, sin lugar a dudas, dirigidos a torpedear el proceso negociador. El ataque fue realizado intencionadamente contra la población civil", dijo el mandatario ruso.

Un Putin visiblemente enojado se preguntó de qué puede hablar con alguien (por Zelenski) que está interesado en el terrorismo y no en la paz. "Al mismo tiempo, piden cesar las acciones militares durante 30 o incluso 60 días. Piden una reunión al máximo nivel. ¿Pero cómo celebrar en estas condiciones una reunión como esa? ¿Para hablar de qué? ¿Quién conversa con aquel que apuesta por el terror, con terroristas?", aseguró.

El líder del Kremlin planteó que una tregua únicamente serviría para que "se cargue al régimen con armamento occidental, para continuar la movilización forzosa y preparar otros actos terroristas similares a los cometidos en las regiones de Briansk y Kursk". Más tarde, y en la primera conversación telefónica desde su elección como Papa, León XIV instó al presidente de Rusia a que haga "un gesto que favorezca la paz" en Ucrania.

En un comunicado, la oficina de prensa vaticana informó que los dos líderes "hablaron sobre la situación humanitaria, la necesidad de favorecer la ayuda cuando sea necesaria, los continuos esfuerzos para el intercambio de prisioneros y el valor de la labor que realiza en este sentido el cardenal (Matteo) Zuppi", designado por el fallecido Francisco como su enviado en el conflicto.

Zelenski rechaza los "ultimátums" de Rusia

Rusia presentó el lunes a Ucrania un memorándum que le exige reconocer la anexión de cinco regiones, incluida la península de Crimea; renunciar a ingresar en bloques militares; reducir el número de efectivos en su ejército y convocar nuevas elecciones presidenciales y parlamentarias, en el plazo de 100 días después de levantar la ley marcial. En su memorando, Kiev rechazó las principales demandas del enemigo y, en particular, se negó a aceptar su neutralidad.

Zelenski calificó el miércoles de "ultimátums" inaceptables las condiciones planteadas por Rusia, en otra muestra del estancamiento que atraviesan las negociaciones. Frente a esta situación, el mandatario ucraniano consideró que continuar con las conversaciones directas con Rusia en el formato actual no tendría "sentido", ya que las reuniones celebradas en Estambul dieron pocos frutos, y llamó a organizar un encuentro con Putin y con Trump.

En un discurso a los ministros de Defensa de países aliados de Ucrania, Zelenski volvió a pedir que se refuerce el envío de ayuda militar a su país para hacer frente a Rusia, en particular para defensa antiaérea. "Cuanto más fuerte sea nuestra defensa aérea, menos valor verá [Vladimir] Putin en atacar nuestras ciudades y pueblos. Así que, por favor, sigan reforzando nuestro escudo aéreo", expresó el presidente de Ucrania.

La representación británica afirmó que se prepara para multiplicar su abastecimiento de drones a Ucrania, y Países Bajos comprometió apoyo naval por un valor equivalente a unos 450 millones de dólares. Con el ejército ucraniano en dificultades en el frente, Zelenski y sus aliados europeos llevan semanas reclamando un alto al fuego incondicional, algo que el Kremlin rechaza. Moscú considera que eso permitiría que Kiev se rearme con la ayuda de sus aliados occidentales e insiste en resolver las "causas profundas" del conflicto.

El primer paso, un canje de prisioneros

Al contrario de Zelenski, el jefe de la diplomacia rusa, Serguéi Lavrov, insistió en que las conversaciones en Estambul eran "importantes" y "útiles" y que condujeron a "resultados concretos". Rusos y ucranianos intercambiarán mil prisioneros de guerra, 500 de cada bando, este fin de semana, tras un canje de dos mil soldados en mayo. Además el proceso de entrega a Ucrania de los 6 mil cadáveres de soldados acordado este lunes en Estambul empezará en breve, informó este jueves la vocera del ministerio de Exteriores de Rusia, María Zajárova.

En busca de garantías de apoyo continuo de Washington, Andriy Yermak, un asesor muy cercano de Zelenski, se reunió este miércoles con el jefe de la diplomacia estadounidense, Marco Rubio, en Washington. "He subrayado que Ucrania hizo todo lo posible para lograr la paz y está lista para un alto al fuego, pero que Rusia lo rechaza. Por eso son necesarias sanciones adicionales", escribió Yermak en un mensaje publicado en X sobre su encuentro con Rubio.

Rusia avanza sobre Sumi

Más de tres años después de la invasión, que costó decenas de miles de vidas, las tropas ucranianas han sufrido meses de reveses en el campo de batalla y las rusas avanzan por sectores en la extensa línea del frente. Las fuerzas rusas siguen ganando terreno en la región fronteriza de Sumi, del nordeste de Ucrania, donde según la plataforma ucraniana de análisis de la guerra DeepState las tropas del Kremlin controlan más de 150 kilómetros cuadrados.

Según el mapa de las hostilidades de DeepState, el Ejército ruso se encuentra a menos de 25 kilómetros de la capital homónima de la región, una ciudad que antes de la guerra tenía 250 mil habitantes y en la que el martes murieron cuatro personas en un nuevo ataque ruso contra el centro del municipio. DeepState advierte que, a esa distancia, las fuerzas rusas pueden empezar a utilizar drones dirigidos con fibra óptica (inmunes a las interferencias electrónicas del Ejército ucraniano) contra la propia ciudad de Sumi, lo que haría aún más vulnerable a la urbe ante unos ataques rusos que ya son constantes.

Putin dijo recientemente que busca crear un cordón sanitario en las zonas fronterizas ucranianas para alejar al Ejército de Kiev de las poblaciones cercanas a la línea de demarcación entre ambos países. Zelenski advirtió posteriormente que Moscú concentra unos 50 mil soldados del lado ruso de la frontera para lanzar sobre Sumi una ofensiva que les permita crear un cordón sanitario de 10 kilómetros de profundidad dentro de Ucrania.