Guerra con Rusia

Ucrania busca voluntarios “hispanoparlantes” para combatir en su ejército

En marzo, el Ministerio de Defensa cifró a los combatientes extranjeros en unos 20.000, de 52 nacionalidades distintas. Cuáles son los requisitos y cuál es la recompensa

La "Legión Internacional para la Defensa de Ucrania" inició una campaña en redes sociales para reclutar militares que hablen castellano o voluntarios sin experiencia en combate. Incluso habilitó una página en español para que los interesados puedan conocer qué requisitos se demandan y qué se les ofrece.

Estos deben ser “hispanoparlantes” de entre 18 y 60 años, que no tengan antecedentes penales, sin enfermedades crónicas (es decir, en buen estado de salud y buena forma física). Además, “todos los candidatos deben ser capaces de realizar los trabajos y tareas básicas de infantería y capacidad de entrar legalmente a Ucrania”. Sin embargo, deben llegar al país por sus propios medios.

En marzo, el Ministerio de Defensa ucraniano cifró a los combatientes extranjeros en unos 20.000, de 52 nacionalidades distintas. No obstante, en julio Rusia aseguró que Ucrania ha contratado desde el comienzo de la guerra a 11.675 mercenarios de 84 países.

La recompensa es un sueldo con valor estándar de soldado ucraniano, el cual varía dependiendo las condiciones del servicio. Las cifras aproximadas son: 600 dólares al mes tras la línea del frente, 1200 dólares al mes por servir en zonas de peligro y 3.300 dólares mensuales si estás desplegado en combate.

“Por favor, tenga en cuenta que estas cifras son una aproximación dado que los ratios de intercambio de moneda pueden variar y también hay unidades que reciben pluses adicionales”, explican desde la Legión Internacional.  

Además, los soldados heridos reciben tratamiento totalmente gratuito y una pensión en caso de discapacidad. Las familias de soldados caídos en combate recibirán unos 400.000 dólares. El único límite que existe es que los extranjeros no pueden ocupar puestos de oficiales. La duración del contrato es de tres años que se prolongarán automáticamente. El voluntario puede rescindir su contrato de reclutamiento mientras no esté desplegado en combate.