Saquean el depósito de un supermercado y se llevan más de 300 latas de cerveza

Durante horas de la madrugada de ayer, un grupo de al menos cuatro delincuentes saqueó el depósito de un supermercado ubicado en la zona de 3 y 601, el cual está funcionando hace apenas un mes. Los hampones se llevaron más de 300 latas de cerveza, varias bolsas de papas fritas y otro tipo de mercadería. Hasta el momento, los implicados están prófugos.

Según precisaron testigos consultados por Trama Urbana, todo sucedió pasadas las 4, cuando debido a los gritos y los ruidos que provocaban los malvivientes, vecinos de las inmediaciones se despertaron. Sin darse cuenta de lo que estaba sucediendo, algunos de ellos fueron a ver por la ventana, cuando observaron primero a dos jóvenes parados en la esquina del lugar.

“Eran dos chicos que no llegaban a 18 años, quienes hacían señas y le gritaban a alguien que estaba en la otra cuadra”, dijo a este diario uno de los frentistas que atestiguó lo sucedido. “Entonces vimos llegar a otros dos jóvenes y cada uno llevaba dos changuitos enormes llenos hasta arriba de mercadería”, agregó el testigo.

Cabe mencionar que otros de los vecinos que vieron lo que pasaba quisieron comunicarse con la Policía, pero sus intentos fueron en vano. “Marqué varias veces el 911, pero nunca me respondieron”, aseveró el hombre, quien prefirió preservar su identidad para relatar los hechos.

Robo y destrozos

Lejos de actuar con sigilo, los delincuentes ingresaron al lugar luego de romper con un fierro las puertas de las persianas metálicas que protegen el depósito. Una vez en el interior, tomaron dos carros de carga mayorista y los llenaron principalmente con latas de cerveza, aproximadamente unas 300, varios paquetes de papas fritas y otro tipo de productos.
Además, arrancaron uno de los motores de la persiana y también se lo llevaron, dejando la misma completamente inutilizable. No fue hasta unas horas más tarde, que el dueño y algunos empleados llegaron al lugar y se encontraron con que habían sido robados.

Según los testigos, los implicados eran todos menores de edad, y algunos escaparon en dirección a avenida 7, mientras que otros continuaron hacia los monoblocks de Barrio Aeropuerto. De igual forma, al cierre de esta edición, el paradero de los autores del hecho seguía siendo desconocido.