Ciencia
La UNLP trabaja en el desarrollo de la vacuna “Spinetta-VAC”
La casa de altos estudios de La Plata recibió un financiamiento de 60.000.000 de pesos, para completar la fase preclínica de este nuevo candidato vacunal contra la Covid-19.
Junto a un consorcio de laboratorios públicos y centros de investigación, un equipo de científicos de la Universidad Nacional de La Plata se encuentra trabajando en el desarrollo de la “Spinetta-VAC”: un nuevo candidato vacunal contra la Covid-19. Los ensayos de este suero se encuentran en etapa preclínica y, de acuerdo a las primeras informaciones, ha mostrado excelentes resultados en las pruebas con animales.
“La plataforma sobre la que se desarrolla la vacuna es la proteína Spike entera trimérica glicosilada de distintas variantes del SARS-CoV-2 (vacuna proteica) expresadas en células de mamífero más un adyuvante comercial aprobado por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat)”, dijo la doctora Daniela Hozbor, directora del laboratorio VacSal del Instituto de Biotecnología y Biología Molecular de la Facultad de Ciencias Exactas. “Una vez inoculadas las variantes de proteína S viral y el adyuvante, el sistema inmune reacciona produciendo una robusta respuesta humoral específica (anticuerpos específicos y anticuerpos con actividad neutralizante), y también una respuesta celular”, agregó.
Además, la investigadora de la UNLP apuntó: “Este desarrollo incluye proteínas provenientes de las variantes de SARS-CoV-2 que hoy representan una amenaza y está diseñada para la aplicación de dos dosis”. Una de las mayores ventajas de este desarrollo es el bajo costo de producción, derivado de la plataforma que emplea, y la mayor estabilidad por tratarse de una vacuna de componentes proteicos. Asimismo, otra de las grandes ventajas es que no requiere de sistemas de conservación dependientes de freezers o ultrafreezers, ya que se conserva a una temperatura de 2 a 8 ºC, lo que la hace de fácil distribución con logística simple en el territorio nacional.
El proyecto, que obtuvo un financiamiento de 60.000.000 de pesos otorgado por el Fondo Argentino Sectorial (Fonarsec), también es impulsado por el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), el Conicet, y el Instituto de Investigaciones Bioquímicas de Buenos Aires (Iibba) de la Fundación Instituto Leloir. Este consorcio tiene como socios estratégicos a National Research Council de Canada y el Instituto Nacional de Enfermedades Virales Humanas “Dr. Julio I. Maiztegui”, de Pergamino.