Nuevo femicidio en la ciudad: murió la mujer quemada en Abasto
Tras casi una semana de agonía, falleció Romina Videla, la mujer de 37 años que no pudo escapar del incendio intencional que provocó su pareja el pasado sábado en su casa de Abasto, informaron fuentes policiales. Héctor Carrizo (60) prendió fuego la propiedad ubicada en 519 y 184 luego de una discusión, para después impedirle […]
Tras casi una semana de agonía, falleció Romina Videla, la mujer de 37 años que no pudo escapar del incendio intencional que provocó su pareja el pasado sábado en su casa de Abasto, informaron fuentes policiales.
Héctor Carrizo (60) prendió fuego la propiedad ubicada en 519 y 184 luego de una discusión, para después impedirle a la víctima salir de la misma. Una vez sofocadas las llamas, Videla fue rescatada y trasladada hasta el hospital Alejandro Korn de Melchor Romero, con el 80% del cuerpo quemado. Desde su ingreso, su estado fue crítico y en las últimas horas se consumó su deceso.
De esta manera, la situación procesal del hombre se ve todavía más comprometida, ya que deberá afrontar cargos por “homicidio calificado por el vínculo y por mediar violencia de género”.
Tras casi una semana de agonía, falleció Romina Videla, la mujer de 37 años que no pudo escapar del incendio intencional que provocó su pareja el pasado viernes en su casa de Abasto, informaron fuentes policiales.
Héctor Carrizo (60) prendió fuego la propiedad ubicada en 519 y 184 luego de una discusión, para después impedirle a la víctima salir de la misma. Una vez sofocadas las llamas, Videla fue rescatada y trasladada hasta el hospital Alejandro Korn de Melchor Romero, con el 80% del cuerpo quemado. Desde su ingreso, su estado fue crítico y en las últimas horas se consumó su deceso.
Así, la situación procesal del hombre se ve todavía más comprometida, ya que deberá afrontar cargos por “homicidio calificado por el vínculo y por mediar violencia de género”. Como si fuera poco, el juez de Garantías, Eduardo Silva Pelossi, rechazó el hábeas corpus presentado por su defensor Ezequiel Funes, que pretendía que quedara en libertad.
Sin embargo, el letrado presentó una apelación ante la instancia superior y adelantó que pedirá la declaración de testigos presenciales del incendio.
Carrizo fue indagado por la fiscal de la causa, María Eugenia Di Lorenzo, mediante un sistema de teleconferencia, pero optó por su derecho de permanecer en silencio. Sí pidió ser beneficiado con un arresto domiciliario ara cumplir con el aislamiento ante la posibilidad de estar infectado con coronavirus, pero tampoco se lo concedieron.