Piden reforzar los trabajos de corte y mantenimiento del pasto en las afueras de la ciudad por el calor

A menos de diez días de la llegada del verano, no son pocos los vecinos de la región que durante el fin de semana comenzaron a expresarse con suma preocupación por la altura que tomaron algunos pastizales, como ocurre en Villa Alba o Villa Zula en la parte sur de La Plata, o también en el barrio Frisón o en otras zonas como San Carlos, Villa Elisa o parte de City Bell, ya en la zona norte del distrito.

De acuerdo a lo expresado por los vecinos que se mostraron molestos por la falta de presencia de operarios o cuadrillas que durante los meses de febrero y marzo se dedican a mantener el pasto prolijo en las zonas donde las veredas son de tierra, el temor es a que se empiecen a juntar mosquitos durante la noche y que esto pueda provocar un brote de dengue o infecciones en parte de la sociedad.

Julio Guiñazú, referente vecinal de la zona de 4 y 616, mantiene permanente contacto con el delegado de Villa Elvira, Carlos Vaccaro, pero en el barrio aseguran que muchas veces dependen de la cantidad de personal disponible en las distintas cooperativas para ejecutar las tareas.

Asimismo, la situación se agravó durante el fin de semana, debido a que las lluvias que cayeron el domingo a la noche en la región potenciaron y aceleraron el crecimiento del pasto que no se está manteniendo, además de generar un ámbito incómodo para las personas que a diario tienen que salir a hacer mandados y se topan con el calor, la humedad y los mosquitos que aparecen en las afueras de la ciudad.

Si bien en el hospital San Juan de Dios (con especialidad en detección y tratamiento de infecciones) no detectan casos severos de dengue desde el verano de 2021, la preocupación por un brote en la incipiente temporada que se avecina mantiene en estado de alerta a los vecinos, que de todas formas también observan con preocupación los posibles incendios que puedan desatarse durante los próximos tres meses en la periferia, debido al calor, la falta de mantenimiento y las chispas que podrían iniciar focos de siniestros, como ya ocurrió durante esta época del año en Parque Pereyra, por citar un ejemplo.

Ya desde los cuarteles de Bomberos Voluntarios habían surgido varias recomendaciones para que los vecinos tuviesen en cuenta ante la llegada del fin de año, las fiestas, y especialmente la quema de los muñecos en la región.