Se quedaron sin trabajo y con sus últimos $200 compraron harina para hacer tortillas

Damiana y Fabián, un matrimonio de San Carlos, instalaron un puesto de tortillas con los últimos doscientos pesos que tenían en la billetera con la esperanza de salir adelante. Fabián, el sostén de la familia, se había quedado sin trabajo: compraron harina y dieron inicio al humilde emprendimiento que hasta hoy les permite ganarse el día a día.

A primera hora de cada mañana, Damiana (39) y Fabián (41) instalan su puestito en la esquina 131 y 38 y prenden el fuego para comenzar a hornear sus famosas tortillas. Además, venden bolas de fraile, tortas fritas y café: transeúntes y conductores no pasan sin llevarse algo, según relata el portal Oeste Platense.

Así trabaja este matrimonio desde 2013, fecha en que Fabián, el entonces sostén de la familia, se quedó sin trabajo. Desde entonces, haga calor, frío o sople el viento se encuentran cada día allí.

"Él trabajaba de albañil y se había quedado sin trabajo. En ese tiempo nos quedaban doscientos pesos nada más. '¿Qué hacemos ahora?', pensé. Yo soy santiagueña, sé de estas cosas. Fuimos a comprar harina y salimos a la calle. Estuvimos primero en 137 y 38, después nos vinimos acá; y hoy hace ocho años que estamos", contó Damiana en diálogo con este medio.

Gracias a Dios, y a la gente, nos va bien. Tenemos cuatro chicos y podemos comer todos los días", agregó Fabián, su esposo.

No obstante, al principio no fue todo color de rosa: tuvieron varios inconvenientes con efectivos de la Secretaría de Convivencia y Control Urbano, ya que en ese entonces no contaban con la habilitación correspondiente. En ese marco, más de una vez les incautaron la mercadería.

"Es durísimo estar en la calle, con frío, calor, lluvia. A veces la gente no entiende", expresó Fabián al respecto. "Nos sacaron varias veces, hicimos todo y perdimos la mercadería", añadió Damiana.