Zoo de La Plata: Los directores del Bioparque reconocieron que los animales extrañan a las personas

Hace dos años, en la previa al Mundial de Rusia, los platenses recibían una triste noticia: tras el fallecimiento de la elefanta Pelusa, el zoológico de La Plata cerraba sus puertas.

Aquel 5 de junio, miles de vecinos sintieron la partida de la elefanta, ese enorme animal que todavía permanece en los recuerdos y las fotos que muchos se sacaron a lo largo de los años.

Este parque de 16 hectáreas, ubicado a pocos metros del centro, conserva secretos y misterios muchas veces desmentidos y otras tantas confirmados.

Ahora bien: ¿qué fue del zoológico en todo este tiempo?

El renovado diario Hoy logró acceder a un permiso especial y exclusivo para responder todas las inquietudes que sobrevuelan en el imaginario colectivo de la ciudad.

Se reproducen especies y los animales extrañan a las personas

Alejandro Serena trabaja desde hace dos años como director del Bioparque de La Plata. Junto a Marcelo Martínez, director general de protección ambiental, secundaron la recorrida de un grupo de periodistas, con reporteros y camarógrafos que retrataron el estado del lugar.

Con una vegetación prominente, árboles y césped cuidados y jaulas que sobreviven intactas al paso del tiempo, el viejo zoológico todavía aloja a 560 especies.

La mayoría son aves (120 flamencos por citar un ejemplo), pero también está el hipopótamo de 14 años, un cóndor de 70 años, un chimpacé y otros veinte monos de diferentes especies. Uno de ellos, incluso, fue secuestrado a un vecino de Ringuelet que lo tenía como una mascota en el fondo de su casa.

 “Hoy tenemos 560 ejemplares de las cuales más del 50% son aves y tenemos distintos tipos de especies. Desde llamas hasta Yaguareté, también tenemos dos cóndores que son emblema del Bioparque que tienen 70 años y que en su momento también fueron emblemas porque había un programa de reproducción cuyas crías fueron liberadas en distintos puntos del país. Hoy ya están en edad avanzada como otros mamíferos, explicó Serena.

“A partir de ahora hay dos proyectos para implementar que tienen que ver con la creación de una huerta en un sector del Parque conjuntamente con la Dirección de Discapacidad del Municipio para que chicos con capacidades diferentes puedan ingresar al Bioparque y que tengan su propia huerta. Por otro lado hay un proyecto de adopción de animales de granja par que las granjas educativas que están radicadas en La Plata o en la región, puedan tener acceso a éstos animales”, comentó Martínez, quien asumió hace tres meses en el cargo.

En relación al comportamiento de algunas especies que todavía están dentro del Bioparque, los dos coincidieron en lo mismo: los animales extrañan las visitas de las personas, pero el Bioparque no funcionará como lo hacía el zoológico con recorridas para ver a animales enjaulados.

“Algunos, como los monos, sí. Hay un mono que si vos le acercás mucho el celular para hacerle una foto te lo va a sacar con la cola. Extiende la cola y te quiere robar el teléfono. Y en el caso de las Llamas no les gusta que le saquen fotos”, concluyeron.

De no mediar contratiempos, durante los próximos doce meses el lugar abrirá como como un Bioparque para recibir visitas guiadas de los colegios.