Entrevista
Alberto Rosende y Daniel Kyri revelan los secretos de Chicago Fire
La serie estadounidense cumplió recientemente 200 episodios, desandando los pasos de un grupo de bomberos que día a día luchan contra los incendios y sus propios dramas.
Los talentosos actores Alberto Rosende y Daniel Kyri son parte de Chicago Fire, la serie de UniversalTV inlcuida en el ecosistema de proyectos que tienen a Chicago y los equipos especiales como tema. Desde enero, la señal estrena episodios de la temporada número 10 todos los lunes a las 21.50, desnudando de una manera muy verosímil el mundo de un grupo de bomberos en la ciudad más grande del estado de Illinois. Para saber detalles de sus personajes y su comienzo en la actuación, diario Hoy habló con ambos en exclusiva.
Alberto Rosende es un actor norteamericano de origen latino que fue parte de la exitosa Shadowhunters, saga que adaptó los clásicos bestsellers preferidos por lectores adolescentes. Daniel Kyri, por su parte, participó de la miniserie The T y también en Chicago P.D. y ahora junto a Rosende son una dupla en Chicago Med.
En el final de la temporada 9, Kelly Severide (Taylor Kinney), Joe Cruz (Joe Minoso), Harold Capp (Randy Flagler) y Tony Ferraris (Anthony Ferrraris) son llamados a un rescate en un bote submarino, y mientras intentan llevar a la víctima a un lugar seguro, el bote colapsa y los atrapa. Con el agua subiendo, el episodio se tornó oscuro, dejando a los fanáticos sin saber qué sucedió.
—¿Cuándo supieron que querían ser actores? ¿Se acuerdan de la primera vez que se les pasó por la cabeza la idea?
—Alberto Rosende: ¿Decís cuándo supe que quería serlo o cuándo actué por primera vez? Porque yo tengo el recuerdo de la primera vez que actué, de chico, a los 9 años; lo amé y no quería parar de hacerlo. Creo que a los 16, en la Secundaria, supe que quería ser actor, vi una entrevista de un actor y me decidí.
—Daniel Kyri: Yo también actué a los 9 años por primera vez, y después, aquí en la ciudad de Chicago, donde nací y me crié, había un programa para estudiar actuación y me preparé para estar en una versión de Amor sin barreras. A los 15 años llegó mi primera audición, con la escena de Romeo y Julieta del balcón, fue horrible, me acuerdo. Éramos muchos chicos de diferentes clases sociales y podíamos encontrarnos ahí a pesar de las diferencias y desde ese momento seguí con esta locura de la actuación.
—De estudiar y querer serlo, a empezar a trabajar, ¿cómo llegaron a su primer rol profesional?
—AR: Estando en el momento exacto y con suerte. Fui al colegio, estudiaba, para mí era la decisión correcta, audicioné, conocí a mi mánager, y así comenzó todo. Creo que, como mi padre dice, la preparación coincide con la oportunidad, y así fue, me preparé, aprendí, creo que hay tres pilares para hacerlo: viendo, estudiando y haciendo. Lo pude hacer; miré muchas películas buenas y obras de teatro, estudiando a grandes actores y viendo cómo llegaron al lugar en el que están. Por suerte cuando te preparás las oportunidades aparecen.
—DK: Suerte es la clave, pero trabajé mucho en teatro hasta la transición de cine y televisión. Un día conocí a un director de casting en un workshop de gente de la industria, y literalmente él me invitó a hacer una audición, pero creo que se trata de preparación y oportunidad, como decía Alberto.
Sobre los roles
—Además de las escenas de acción, que deben ser muy divertidas de rodar, ¿qué es lo que más les gusta de interpretar a Blake y Darren?
—AR: Me gusta mucho la posibilidad de tener los dos extremos: la acción y la vida “real”; la parte de relaciones, los vínculos, pero también la acción.
—DK: La verdad es que la paso tan bien trabajando con Alberto, cuando tenemos escenas juntos, que no lo siento como trabajo, es todo feliz y divertido cuando estamos en el set, por lo que cualquier desafío es fácil.
—La serie muestra el trabajo y el detrás de escena de los bomberos. ¿Qué aprendieron desde la ficción sobre esta profesión?
—AR: Que se necesita más de lo que creemos, no es solo ser valiente, o ser fuerte, tenés que ser inteligente, amable, todo lo que creemos que deben ser, son estereotipos, tenés que ser valiente pero en la situación, trabajando en equipo y entendiendo que el otro es lo que importa.
—DK: Es algo de fortaleza.