Caña con ruda para espantar los males del invierno

Agosto es un mes clave para el sur del mapa, llega con la celebración de la Pachamama, la madre tierra, la más popular de las creencias de los pueblo originarios de América Latina y hay varias formas de honrarla, y a la vez, espantar los males del invierno para conservar la buena salud. 

Un rito arraigado en el Litoral argentino es la toma de caña con ruda que este año tendrá un significado especial. Pedirán espantar al coronavirus.

El ritual de la caña con ruda proviene de los guaraníes, que utilizaban esta planta para la medicina, especialmente contra los parásitos, malestares estomacales y la irritación de picaduras de bichos. Pero más allá de sus propiedades medicinales, con el paso del tiempo la ingesta de la caña con ruda se convirtió en una suerte de conjuro contra las malas ondas, la envidia ajena y la mala suerte. 

Los pueblos originarios decían que se producían muchas muertes de hombres, mujeres y niños durante el invierno. Las cosechas se arruinaban por las heladas y se convertían en tiempos duros para los pobladores. Las desgracias ocurrían fundamentalmente en agosto, por lo que los caciques y brujos tomaron la decisión de que se tomara la caña con ruda macho como remedio natural para sus males.

Para preparala se agrega a una botella de no más de 250 centímetros cúbicos, hojas de ruda macho, ya que son más anchas y se cree que tiene propiedades más fuertes. La maceración en la bebida debe durar un mes, y se guarda en un lugar oscuro y seco.

Según la costumbre popular, tres tragos de caña con ruda al empezar el 1° de Agosto “espantan todos los males del invierno”, incluidas las enfermedades que suelen aparecer en estas épocas. Hay quienes toman hasta siete tragos seguidos y, siempre de acuerdo a la creencia, los sorbos deben ser ininterrumpidos e impares.

En las provincias argentinas de Chaco, Formosa, Corrientes, y Misiones, el 1º de agosto es casi una fecha sagrada y el beber caña con ruda es tan importante como cualquier otra fecha sagrada.