Cuentas claras

Cómo es el acuerdo prenupcial que firmaron Britney Spears y Sam Asghari antes de la boda

En el documento que firmaron la princesa del pop y su ahora esposo, hay un punto clave sobre la fortuna de ella; estos son todos los detalles del convenio, que cada vez son más comunes entre las celebridades.

Britney Spears y Sam Asghari contrajeron matrimonio el pasado 9 de junio en Los Ángeles, California, y es hasta ahora que se dio a conocer que sí existió un acuerdo prenupcial, en el que ambos estuvieron en total acuerdo. Antes de la ceremonia, la pareja se reunió con un equipo legal para hacer este trámite que muchos famosos acostumbran para protegerse, sobre todo en el caso de la princesa del pop, quien acaba de recuperar el control de sus bienes. El convenio contempla cómo será la repartición en caso de un divorcio o separación.

Britney no quiso arriesgar su fortuna y la blindó antes de contraer nupcias con el amor de su vida. La revista People confirmó que el documento detalla que Asghari no tendrá derecho a reclamar ninguna cantidad económica ni acceder al dinero de la cantante, en caso de que decidan disolver su unión. Así quedaron protegidos todos los bienes que ella adquirió antes de casarse.

Ya se esperaba algo así, ya que no solo el abogado de la intérprete de “One more time”, Mathew Rosengart, le sugirió hacerlo, sino que el propio Sam confirmó la existencia de un acuerdo prematrimonial: “Claro que firmaremos un acuerdo prenupcial para proteger mi coche y mi colección de zapatos en caso de que me eche algún día”, dijo entre bromas.

La fortuna de Britney Spears

El patrimonio de Britney está valuado en 70 millones de dólares, según Celebrity Net Worth, sitio especializado en calcular las fortunas de los famosos. De ahí la importancia de tener un acuerdo, en el que el actor no tuvo ninguna discrepancia. Cuando se llegó a un documento sin objeciones, Spears llamó a sus abogados para realizar la firma de la versión final.

Aunque hay algo que sí se debe tomar en cuenta, y es que este documento solo contempla todos los bienes que la cantante adquirió antes de casarse, por lo que si compra propiedades o incrementa su fortuna mientras el iraní es su esposo, ésta si se disputaría si ocurriera un divorcio. A esto se le suman las compensaciones en caso de que tuvieran descendencia. Hace unos meses, la pareja sufrió el aborto espontáneo de su primer bebé.