¿Cómo prevenir el golpe de calor?

Todas las personas termorregulamos nuestra propia temperatura. Si tenemos calor, los vasos sanguíneos se dilatan y la piel se pone caliente y, con eso, irradia la temperatura hacia el exterior y la pierde.

Es decir, porque tenemos calor, queremos perder temperatura.

Cuando las temperaturas a nuestro alrededor son demasiado elevadas, 39 ó 40 grados, nos ponen en jaque y no podemos termorregular como es debido.

Si a un día extremadamente cálido, le sumamos condiciones de humedad, más del 60% a nuestro alrededor, no podemos ni perder temperatura hacia el exterior porque se satura nuestros sistemas de termorregulación, pasa al aire.

Lo ideal es mantener una abundante hidratación.

El cuerpo nos avisa cuando tenemos sed, pero, y esto es importante saber que la sed es tardía, es un mecanismo de alarma porque ya está deshidratado, al menos en un 5%.

Por eso se recomienda tomar agua antes de tener sed, beber varias veces en el día, en pocas cantidades.

Pero usted tiene un medidor propio, la orina. La orina debe ser de color transparente, esa es la forma de controlar que usted está bien hidratado. Es decir, si la orina está bien diluida, si es bien transparente, usted está correctamente hidratado.