Folklore y rock

El Festival de Doma y Folklore de Jesús María y el Cosquín Rock se reprograman para abril

Todo dependerá de si hay o no vacuna para entonces.

La pandemia alteró definitivamente la agenda de la Córdoba festivalera. La edición 56 del Festival Nacional de Doma y Folklore de Jesús María -que abre tradicionalmente el año- se hará en abril si hay vacuna contra el Covid-19. Bajo la misma condición, por esa época llegaría el Cosquín Rock que habitualmente es en febrero.

José Palazzo, creador y productor de Cosquín Rock, anunció que febrero ya está descartado: "Podría ser a finales de marzo o abril; dependemos de la vacuna. Con el actual protocolo que se plantea no podemos hacerlo, veremos cómo evoluciona la situación".

Contó que sí organizará shows puntuales en anfiteatros al aire libre de distintos puntos de Córdoba durante el verano. Ya recorrió la mayoría de los existentes -entre los más importantes están los de Cosquín, Villa María y La Falda- y está empezando a diseñar una agenda posible de presentaciones.

"Hay interés de los artistas, todos queremos volver a trabajar. Respetaremos las medidas que se resuelvan para la asistencia", insistió Palazzo. El Cosquín Rock que se hace a inicios de febrero en Santa María de Punilla cuenta con un importante despliegue de escenarios, pasan más de 150 artistas y hay espacios de food trucks. Ese esquema con los protocolos que plantean, es impensable de repetir.

En el caso de Jesús María, Nicolás Tottis presidente de la comisión organizadora, dijo que, aunque analizaron otros formatos para hacerlo en enero, la decisión fue "no poner en riesgo la salud ni el prestigio" del festival y esperar la llegada de la vacuna. "Si como dicen desde el Gobierno se empieza a vacunar a fin de año tenemos margen para organizar para abril", resumió.

Admitió que sin doma iban a tener que cambiar el nombre del festival: "Además la esencia nuestra es la música, el encuentro, la danza, el asado, el choripán, un vino compartido. Sin nada de eso, sin moverse la gente de su lugar, es mejor que estén las garantías".

Tottis también señaló que como las escuelas son parte de la organización -la recaudación del festival se distribuye entre las de la zona- sería "extraño que no hubiera clases en todo el año, y hagamos un festival en el que esa misma gente deba trabajar".

"Tenemos que buscar la forma de colaborar y ayudar a un sector que está muy mal, como es el de los artistas -continuó-. Veremos si podemos hacer algún tipo de show con distanciamiento, con burbuja, pero siempre shows muy puntuales".

La que sí está confirmada es la edición 2021 del tradicional festival de Cosquín, que será del 23 al 31 de enero y presencial. Como todos los años, aunque con protocolos por la pandemia de Covid-19, se abrirá la plaza Próspero Molina.