El resurgir de los teléfonos básicos: Sin internet ni redes sociales

Muchas personas viven agobiadas por la cultura de las redes sociales y la comunicación a través de las aplicaciones. Por eso no sorprende realmente que haya quienes busquen una forma de desconexión para vivir sin ansiedad.

Actualmente, en un mundo dominado por los smartphones, aumentó la búsqueda de viejos móviles y sus usuarios son mayormente jóvenes. 

Así, nace el concepto de "dumbphone" porque también hay uno inteligente al que conocemos como Smartphone. En realidad su denominación sirve para distinguirlos de los teléfonos actuales. Son los viejos celulares que servían para enviar mensajes de texto y también algo que hoy casi suena extraño: realizar llamadas telefónicas.

Estos celulares no cuentan con conexión a internet, no poseen redes sociales y su batería dura semanas. Sus funciones están reducidas a unos pocos servicios y su tamaño suele ser pequeño.

La principal razón por la que muchos abandonan el Smartphone y pasan al celular básico es para vivir menos tiempo conectado.

Los antiguos celulares no tienen YouTube, ni correo electrónico. Pueden sacar fotos pero no tienen aplicaciones para compartirlas y pueden enviar mensajes pero ningún sticker, GIF o audio. Solo mantienen funciones básicas como una agenda de contactos, calculadora, linterna y hasta radio (en algunos más modernos) pero no mucho más.

Estas limitaciones hacen que muchos sientan que los ayuda a enfocarse en sus trabajos mientras están frente a una computadora en sus horas laborales y que nada los distraiga en sus momentos de ocio.

A este fenómeno se lo conoce como bienestar digital y sigue sumando adeptos a diario.