TECNOLOGIA
Elon Musk quiere convertir a Twitter en un banco digital en el que se pueda operar con dólares y criptomonedas
Según informó la compañía, el objetivo es poder monetizar la aplicación. Los ingresos actuales son por publicidad.
Elon Musk tiene un nuevo plan para Twitter: convertir a la red social en una plataforma que sirva para múltiples propósitos, entre los que se encuentra la posibilidad de que sus usuarios puedan realizar pagos digitales entre unos y otros.
Al parecer, el nuevo dueño de la empresa quiere imitar a la app china WeChat y además permitir las videollamadas, mensajes de texto encriptados y un chat de video dentro de su aplicación.
Según una publicación del Financial Times, Twitter ya ha solicitado licencias reguladoras y se encuentra trabajando en el software necesario para permitir los pagos digitales en la plataforma y cumplir el deseo de Musk.
Musk tiene la intención de empezar a usar monedas fiduciarias (dólares) en la plataforma, pero en un futuro próximo facilitar los pagos con criptomonedas. El magnate ya había dejado claro el año pasado su deseo de que la empresa se introduzca en los servicios de tecnología financiera, como las transacciones entre particulares, las cuentas de ahorro y las tarjetas de débito.
Aunque los detalles exactos siguen siendo un misterio por ahora, lo concreto es que Esther Crawford, directora de gestión de productos de Twitter, es quien está a cargo del proyecto.
Las razones por las que Twitter podría incorporar los pagos digitales a su plataforma
Esta movida de Twitter no es más que otro esfuerzo de Musk por monetizar la plataforma de microblogging, cuyos ingresos dependen tradicionalmente de la publicidad.
Aunque la empresa introdujo el servicio de suscripción Blue antes de que el CEO de Tesla la adquiriera en una operación de 44.000 millones de dólares el año pasado, el nuevo propietario ha subido desde entonces las tarifas e incluyó nuevas ventajas en el servicio como forma de aumentar los ingresos, especialmente ante la disminución de los ingresos publicitarios.
Una de esas ventajas de suscribirse al polémico y nuevo servicio fue el famoso tilde azul para quien lo pague, que sumergió a la red social en un caos e incertidumbre sin precedentes al presentar la posibilidad de que cualquiera pueda verificar su cuenta.