Julián Mourin presenta su nuevo material

Corría el 2020 cuando Julián Mourin puso manos a la obra para el lanzamiento de Los diamantes, un disco que contiene nueve canciones que datan sobre viajes, aventuras, relaciones humanas y otros lares. Esta propuesta nace durante un viaje del también compositor a las playas de Brasil y Uruguay. Además contó con la colaboración de artistas de primera línea tales como Fernando Samalea, Adrián Berra y la artista japonesa Uri Nakayama, entre otros.

Respecto al trabajo hecho, Julián revela: “Este disco lo trabajé de manera totalmente distinta a los anteriores. Pude salir de mis vicios, de mis trampas. Pude hacerlo en compañía e invitar a otras personas a participar del juego. Cristian Bonomo estuvo al lado mío desde la etapa de cerrar los temas hasta la masterización. “Ale” Lauphan aportó lo suyo desde la co producción, “Gabi” Beltramino me ayudó a trabajar las voces, “Yago” Escrivá a pulir las guitarras, “Paco” Amenabar y Andrés Mayo a encontrar el sonido que buscábamos. Fueron piezas claves y estoy super agradecido con sus aportes”. La presentación del trabajo discográfico sufrió un freno debido a la suspensión de las actividades ligadas a la cultura durante el advenimiento de la pandemia del coronavirus. Ahora que han pasado dos años de aquella situación, el músico festejará sus logros con una actividad que tendrá lugar el viernes 3 de junio en La Tangente, el espacio ubicado en Honduras 5317 en Capital Federal. Para este momento, Mourín estará acompañado junto a su banda que está integrada por “Chitrili” (batería), “Ine” Maguire (voces), “Pupú” Colina (bajo), Jeanette Nenezian (trompeta) y contará con las visuales realizada por Pedro Urruti, “Pocho” Badino y Christian Silva.

—¿Cómo surgió el proyecto?

—Después de estar unos años con la banda Chúcaro, decidí probar salir solo, así en guitarra y voz por ahí. Al tiempo empecé a grabar mi primer disco y así arranqué. De mandado nomás. Los diamantes es mi tercer disco, y nació después de un proceso personal fuerte que atravesé hace algunos años. Intuía que después de eso iba a componer algo diferente, más interesante. Compuse mucho material, mucha prueba y error, mucho experimento, hasta llegar a estas nueve canciones finales.

—¿Qué mensajes están implícitos en tus letras?

—Estas letras son como pincelazos de experiencias vividas luego de haberme sumergido en algunas cuevas mías y haber vuelto a la superficie con una percepción renovada, distinta. Y todo eso fue antes del 2020.

—¿Cómo describirías las melodías y las atmósferas que hay en este disco?

—Me encanta componer melodías, encontrarles su personalidad. Es difícil describirlas porque son bastante distintas entre sí. Podría decir que fueron pulidas muy artesanalmente algunas y a pesar de eso suenan frescas. Las atmósferas, por otro lado, son variadas, algunas cargadas como nube de lluvia en No te vayas o Aventurarse. Y otras más livianas y solares como en Manos en el aire o Porque sí.

—¿Cuánta expectativa tenés ante este show? ¿Qué sensaciones te rodean?

—Trato de tenerlas medio cortitas a las expectativas, aunque estamos dando lo mejor para que sea un show inolvidable. Estoy con mucho entusiasmo y a la vez con vértigo, con adrenalina. Son varias aristas en una presentación de disco.

—¿Cuál es el balance realizado sobre el grupo de trabajo tan versátil?

—Muy positivo el balance. Encontré la forma de trabajar, la que quiero seguir teniendo de ahora en más, y tiene que ver con armar equipo. Fue clave haber hecho este disco con este grupo personas. Me ayudaron a saltear mis trampas y llegar a lugares bastante más altos que a los que hubiera llegado trabajando solo. Fue un gran acierto trabajar así y estoy muy agradecido.