Irán

La ingeniosa forma de los antiguos persas para mantenerse frescos

Se trata de los llamados "captadores de viento". La mayoría de ellos se encuentran en la ciudad de Yazd, aunque es posible que se hubieran originado en Egipto.

La ciudad de Yazd, en el desierto de Irán, fue durante mucho tiempo cuna del ingenio creativo.

Alberga antiguas maravillas de la ingeniería que incluyen una estructura de refrigeración subterránea llamadayakhchal, un sistema de riego subterráneo llamado qanat; e incluso una red de mensajería llamada pirradazisque tiene 2.000 años más que el servicio postal estadounidense.

Y entre estas antiguas tecnologías se encuentran también los badgi, también llamados "captadores de viento" o "atrapavientos".

Se dice que Yazd tiene la mayor cantidad de atrapavientos del mundo, aunque es posible que se hubieran originado en el antiguo Egipto.

Pero en Yazd pronto resultaron indispensables, volviendo habitable esa parte de la cálida y árida meseta iraní.

Cómo funciona

Hay dos fuerzas principales que impulsan el aire a través de la estructura y hacia el interior del edificio: el viento entrante y el cambio en la flotabilidad del aire según la temperatura (el aire más cálido se sitúa encima del aire más frío y denso).

El aire accede por las aberturas del captador de viento y se canaliza hacia la vivienda, depositando arena o escombros al pie de la torre. Y fluye por el interior del edificio, a veces a través de depósitos de agua que lo enfrían aún más.

Ello hace que el aire caliente del interior se eleve y saldrá del edificio a través de la torre, ayudado por la presión dentro del edificio.