Entrevista
Mariano Martínez y Nicolás Cabré vuelven juntos al teatro
La icónica pareja de éxitos como Son amores y Los únicos vuelve a subirse a un escenario con roles distintos: uno dirige, el otro actúa.
Con dirección de Nicolás Cabré y protagónico de Mariano Martínez, el próximo 4 de enero sube al Multiteatro Comafi (CABA) la obra Tom, Dick y Harry, de Ray y Michael Cooney, con Yayo Guridi, Bicho Gómez y María Valenzuela, entre otros. Este multimedio dialogó con Martínez y Cabré para saber más del proyecto.
—¿Cómo fue el reencuentro?
—Mariano Martínez: El reencuentro es ahora laburando, espectacular, muy bueno, colmó cualquier cosa que uno puede soñar.
—Nicolás Cabré: Es raro decir reencuentro porque siempre estuvimos hablando, comunicándonos, hay algo que nos nace cuando estamos trabajando, por conocernos, con solo mirarnos, cuándo sí, cuándo no; el tiempo no pasa, por eso es raro hablar de reencuentro.
—Decís “el tiempo no pasa”, pero sí pasó. ¿Cómo es ahora encontrarse cada uno con un rol distinto?
—MM: Es espectacular tenerlo a Nico como director, parece que lo hiciese de toda la vida, es claro, siempre está bien, cuando te tiene que decir algo lo hace y lo dice bien, tiene fundamento y experiencia, o te lo actúa, sigo aprendiendo de él mucho, sobre todo en la comedia, soy un privilegiado, hacer comedia, estar en teatro y aprendiendo de él, que es lo que quería.
—NC: Es hermoso para mí, y vivir esta experiencia con él es todo más fácil, porque imagínate que si en mi primera experiencia como director me encuentro con alguien que conozco, que sí sé que tengo que apoyarme en alguien, lo puedo hacer, para mí él es fundamental, me da mucha tranquilidad que esté arriba del escenario, principalmente por saber que está cuando necesitas un salvavidas, y cómo expresarnos cuando nos tenemos que expresar.
—¿Qué es lo que tiene esta comedia en particular?
—Está bien escrita, es raro leer una obra a la que no le tenes que modificar nada. Es una obra que si aprendes la letra y la decís no hay que hacer mucho más, y eso no es muy frecuente de encontrar, la obra arranca y termina y no tiene baches, va como un tren.
—¿Cómo fue componer el personaje, alguien diferente a vos?
—MM: No siempre las apariencias son así, pero sí, la composición salió de apoyarme mucho en Nico, creyendo por donde ir y con lo que devuelven los compañeros en los ensayos.
—NC: Se pone la comedia en sus espaldas, es un Mariano distinto, está muy bien.
—Venís en esa búsqueda, de hacer cosas distintas...
—MM: Es el camino más que la búsqueda, es lo que quiero, se hace difícil, porque los cambios llevan un proceso y estoy muy contento del camino.
—Ambos tienen actividades más allá de lo actoral. Nico, vos corrés. Mariano, vos entrenás. ¿Qué significan para cada uno?
—NC: Correr es hermoso, me lleva a otro lugar, me salva la vida. Es un lugar de encuentro con amigos, pasando el tiempo hablando de carreras, entrenamientos, zapatillas. Tengo la suerte de sacarme la cabeza y salir del qué dijeron, me libera y me sana la cabeza.
—MM: El taekwondo es muy importante en mi vida, era una asignatura pendiente que tenía de chico, llegar a cinturón negro, competir en eso, y lo pude hacer en dos torneos, ahora lo tengo que dejar por este trabajo, pero es algo que me conectó mucho con mis hijos, que también hacern, la más grande hace, hasta la chiquita está latente, me parecen muy sanos los principios que tienen, es importantísima esa conexión, y creo que todo lo que te haga bien es importante.
—¿Qué significa para ustedes hacer temporada en 2023?
—MM: Es un privilegio trabajar con este gran elenco dirigidos por Nico, es importante, es lo que amo hacer, mi vocación, y hacer lo que te gusta hacer es un privilegio y hay que disfrutarlo.
—NC: Es un desafío para el nuevo año, y si bien la pandemia quedó lejos, todavía sigue su coletazo, y se espera que este año se arranque como otros años anteriores, que venga gente de las provincias. Cuando arrancamos con Me duele una mujer, se suspendió por brotes, pero este año me da la sensación de que todo puede volverse a encaminar de nuevo y sea todo normal.