Uganda
Nace un chimpancé albino en estado salvaje y su propio grupo lo mata
Por vez primera se supo de una cría albina nacida en la naturaleza. Sin embargo, a las pocas semanas, su propio grupo la ultima con llamativa brutalidad. Algunos chimpancés mostraron agresividad hacia la cría y también emitían aullidos de alarma parecidos a cuando se topan con una serpiente.
En Uganda, expertos en chimpancés hallaron por vez primera un caso de albinismo. Lo registraron en una población salvaje de chimpancés, no obstante, la cría albina fue ultimada con violencia por miembros del grupo cuando tenía tan solo unas pocas semanas de edad.
Los especialistas relevaron el descubrimiento en un trabajo publicado en el American Journal of Primatology, en el que confiesan que solo han visto pocos casos de albinismo en "primates no humanos" en estado salvaje, concretamente, en macacos Toque, macacos Bonnet y monos araña.
El hecho sucedió en 2018 en la comunidad de chimpancés de Sonso en la reserva forestal de Budongo, en el oeste de Uganda, y, a pesar del trágico resultado, la investigación permitió a los especialistas discutir y documentar el comportamiento y actitudes de los chimpancés hacia individuos con apariencias diferentes.
Apariencia muy inusual
"Estábamos interesados en observar el comportamiento y las reacciones de otros miembros del grupo hacia este individuo con una apariencia muy inusual", reveló Maël Leroux, autor principal del estudio de la Universidad de Zúrich a IFLScience.
Luego del primer avistamiento de la cría con su madre, los expertos notaron que otros chimpancés del grupo mostraban signos de disconformidad y agresividad hacia ella con anterioridad al ataque. "Además, durante un encuentro observaron que, cuando estaban cerca de ellas, algunos miembros del grupo emitían aullidos de alarma similares a los que chimpancés suelen realizar cuando se encuentran con animales peligrosos o extraños, como serpientes o humanos desconocidos", publica la agencia Rt.
Seis contra uno
La muerte se dio después de un feroz ataque de seis chimpancés, incluido el macho alfa del grupo. Los chimpancés comenzaron a morder los dedos, piernas y orejas de la cría, mientras la víctima gritaba.
Después del ataque, algo raro, varios chimpancés comenzaron a acariciar, olfatear e inspeccionar el cuerpo. Este "no parece ser un comportamiento típico que los chimpancés dirigen hacia una cría muerta", dijeron los investigadores. Según el estudio, la apariencia inusual del animal generó una atención especial entre los miembros del grupo.