REEDICIÓN

Taylor Swift brilló en “Saturday Night Live” con la versión de “All Too Well”

La cantante está presentando la reedición de su disco “Red”.

Taylor Swift se presentó anoche por el programa Saturday Night Live como parte de la promoción de la reedición de su álbum Red (2012) llamado Red (Taylor’s Version).

La cantante estadounidense interpretó el tema “All Too Well”, que en esta nueva versión dura 10 minutos. Mientras cantaba, el público pudo disfrutar en la pantalla del documental que acompaña a la canción, protagonizado por Sadie Sink (Stranger Things) y Dylan O’Brien. El clip fue escrito y dirigido por Taylor.

La historia que esconde “All Too Well”, el hit de Taylor Swift

“Aquí va una canción triste sobre el otoño”, contó la cantautora durante su presentación en el especial Tiny Desk Concert, en 2019. Un tema que trata sobre el fin de una relación amorosa y la nostalgia luego de la separación.

Según el análisis de los fans, la canción está basada en la relación de la artista con Jake Gyllenhaal, en 2010. Según publicó por aquellos días el diario The Sun, el actor gastó una importante suma de dinero para alquilar un avión privado para que Taylor viajara desde los Estados Unidos a Reino Unido para verse por unas horas.

A diferencia del original, esta reedición contará con 30 canciones. “Como tu amigo que te llama en medio de la noche hablando y hablando de su ex, yo no podía dejar de escribir. Esta será la primera vez que se escucharán las 30 canciones que debieron incluirse en ‘Red’. Y bueno, una de ellas dura incluso diez minutos”, anunció Swift en sus redes sociales.

Este trabajo, sucesor de Fearless (2008), fue el despegue de la artista a nivel internacional. También marcó un cambio en su rumbo sonoro, con el paso del country al pop. Dejó dos canciones importantes: “We Are Never Ever Getting Back Together” y “I Knew You Were Trouble”.

Por qué Taylor Swift está reeditando sus primeros discos

La historia por la que Swift, única mujer ganadora de tres Grammy en la categoría álbum del año, perdió el control de sus propias composiciones es uno de los capítulos más extraños de la industria musical.

Aquellos primeros discos se editaron bajo el sello de Nashville Big Machine, que tenía el control de la mayor parte de los derechos de sus canciones, hasta que en 2019 firmó un contrato más importante con Universal Music, que le daba los derechos de lo que publicase en el futuro.

Pero el representante musical Scooter Braun compró la discográfica Big Machine y todas las grabaciones de los primeros seis álbumes de la artista, varios de ellos discos de platino, quedaron bajo su control. Aunque Taylor intentó comprárselos, no tuvo éxito.

Al ser compositora, no tenía el control de las grabaciones, pero sí el de las letras. Por lo que podía volver al estudio y replicar toda su discografía anterior.