Elecciones 2023

Massa polariza con Javier Milei luego de las PASO

Confirmó que habrá una suma fija y beneficios para los sectores de bajos ingresos por el “daño” de la devaluación. Señaló que Unión por la Patria es competitiva, criticó al libertario por proponer cerrar el Conicet y un Plan Bonex, y aclaró que seguirá al frente del Ministerio

Habló después de 72 horas de bajo perfil y reconoció que su tarea primordial es hacer control de daños y moderar incertidumbres. Sergio Massa fue a la televisión y explicó cómo tiene previsto encarar la nueva etapa, después del adverso resultado que obtuvo el oficialismo en las PASO, y de una devaluación del 20%, que llevó al dólar libre a rozar los 800 pesos y le metió más presión a una economía que viene acumulando desequilibrios.

Primero negó que vaya a dejar su doble condición de ministro/candidato, después de que el diputado Eduardo Valdés planteara públicamente que debería dedicarse las 24 horas a hacer campaña para llegar al balotaje. Aunque evitó dar nombres, Massa les contestó a quienes dudan “si conviene quedarse en el Ministerio mientras uno es candidato. Cuando estoy al frente en la tormenta agarro el timón y no lo suelto”. “¿Se queda hasta el 10 de diciembre?”, le preguntaron en el canal TN: “Sí, no solamente eso. Lo peor que podría hacer” es no continuar, dijo Massa, porque a su juicio “le haría mucho daño a la estabilidad económica argentina”.

Se trató de una definición de primer orden porque Massa enfrenta en simultáneo a su objetivo como candidato de entrar en la segunda vuelta junto al objetivo urgente de conseguir que el directorio del Fondo Monetario autorice el miércoles próximo el desembolso de unos 8.000 millones de dólares imprescindibles para pagar deuda y estabilizar la economía.

Massa confirmó en la entrevista de anoche que la devaluación que se ejecutó este lunes formó parte del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. Y que fue de “sólo” el 20% después de una negociación que había empezado con una exigencia del 100% y, luego, del 60%.

“Arrancaron pidiendo 100% de devaluación; después se plantaron en la exigencia de una devaluación del 60% y, finalmente, el acuerdo al que arribamos y que va a generar que la semana que viene tengamos casi 8.000 millones de dólares de desembolso, cerró en una negociación del 20%”, afirmó y agregó. “Si el 20% metió toda esta incertidumbre, imagínese el 100%. Es importante remarcar que es lo que dice Bullrich que va a hacer el 10 de diciembre cuando dice que va a levantar el cepo: es una devaluación del 100%. Que entiendan cuál es el impacto de la economía”.

Fue una de las dos veces que Massa habló de Bullrich -la segunda fue una ácida ironía- porque el ministro/candidato confirmó en la entrevista con el programa A Dos Voces lo que había publicado Infobae desde el lunes: la decisión de polarizar con Javier Milei, el libertario que fue el más votado en las PASO, con algo más del 30% de los sufragios.

“Lo que Milei dijo, para que lo entienda el ciudadano común y espero que los bancos alerten a sus clientes, es que si él es presidente va a haber un Plan Bonex. Cuando describe cómo trata los pasivos del Banco Central y a las Leliq, lo que está diciendo es ‘voy a manotear el dinero de los ahorristas’. Ahora ellos están acostumbrados a hacerlo, porque ese fue el origen de la crisis del 2001″, aseguró Sergio Massa.

Y redobló esa diferenciación con otra idea que expuso Milei, que comparó la NASA con el Conicet como argumento para cerrarla. “Milei tiene un desconocimiento absoluto del Estado, porque es comparable la NASA con la CONAE, que es la que hizo el SAOCOM, que tiene 300 empleados, contra los 17.000 que tiene la NASA. Si no empezamos a poner seriedad al debate de cara a lo que viene en la Argentina, estamos en un problema. Dijo (Milei) le voy a sacar a los jubilados el programa de medicamentos y la fórmula de movilidad, pero después dijo pero no se la voy a tocar a la Iglesia y a los jueces”.

Las declaraciones de Massa confirman que eligió como antagonista a Javier Milei, al mismo tiempo que el libertario aseguró en entrevistas que concedió a diversos canales de televisión y radios que “la verdadera pelea” es entre La Libertad Avanza y Unión por la Patria, entre el kirchnerismo y los libertarios.

“Están planteando lo mismo, ellos tienen votos solapados. Milei dice bien, cuando dice que el votante de Rodríguez Larreta es un votante más de centro, más cercano al radicalismo. No me imagino un radical avalando el arancelamiento universitario, me parece absurdo”, continuó Massa.

“Cuando Milei dice que Bullrich es la quinta marca de él (...) lo que entiendo es que ellos son dos candidatos que expresan el mismo electorado y las mismas ideas. Uno ganó y otro que perdió: Bullrich sacó la mitad, porque Milei sacó 30 y Bullrich sacó 15″, afirmó Massa, y subrayó “es muy difícil pasar de la idea del ‘todo o nada’ a ‘un poquito y un poquito’. ¿Qué va a decir Bullrich para hablar y moderarse? ¿un poquito y un poquito, en lugar de todo o nada?”.

Los cuestionamientos de Massa contra Bullrich coinciden con las críticas que el líder libertario viene expresando desde antes de las PASO y que se vienen agravando a medida que van pasando los días. De “socialista” a “montonera”, expresó últimamente Milei, que acusa al esposo de la candidata de Juntos por el Cambio de haber operado en su contra.

Pero además de la definición de que seguirá en el Ministerio de Economía y quién es su antagonista perfecto, el candidato de Unión por la Patria confirmó que habló con la vicepresidenta Cristina Kirchner, quien hace semanas bajó el perfil a la mínima expresión, se quedó en Río Gallegos después de la votación y, a cuatro días de celebradas las PASO, no emitió pronunciamiento alguno.

“Hablé con Cristina”, confirmó Massa y resaltó que tanto ella como él coincidían que en las primarias podía darse, como ocurrió, “el escenario de tercios. De hecho cuando planteé que no tenía que haber primarias lo planteé desde la lógica que íbamos a un escenario de tercios y el gobierno se debilitaba en el proceso de cara a la PASO”.

“Respecto de la elección, (Cristina Kirchner) tenía algún marco de tranquilidad y satisfacción porque claramente es un escenario que deja al gobierno en competencia, vamos a tener que hacer correcciones en un momento complicado. Argentina convive con un acuerdo con el Fondo que dejó Macri y dejó a la Argentina hipotecada”.

Así como la vicepresidenta, el presidente Alberto Fernández también bajó el perfil. “No soy el presidente. Soy candidato a presidente. Y soy ministro de Economía porque me hice cargo cuando empezó la tormenta. Estaba muy cómodo en la Cámara de Diputados. Sin embargo, cuando vino la crisis, un ministro (por Martín Guzmán) se escapó, se escaparon todas las variables, dejó incumplido el acuerdo con el Fondo y dejó un programa de vencimientos como el que dejó. Yo no me escapé a mi responsabilidad y al llamado de mi Patria, porque yo hago política convencido de que no es importante venir a los canales de televisión a decir cosas simpáticas, sino a hacerse cargo cuando las papas queman”.

Más allá de ese repliegue, Massa expuso cuál es la estrategia sobre la cual trabaja para tener en las elecciones generales del próximo 22 de octubre: “Tenemos un escenario con Milei con 7 millones de votos, Unión por la Patria, 6.460.000, y Juntos por el Cambio 6.600.000. En 500 mil votos están las tres fuerzas políticas. Y hay 13 millones de argentinos que no se expresaron, porque no fueron a votar, porque votaron en blanco o porque votaron a otras fuerzas políticas. Y no incluyo lo que sacó Hacer (del cordobés Juan Schiaretti), ni lo que sacó la izquierda (de Myriam Bregman)”.

Además, envió un mensaje a la interna de Unión por la Patria, donde quedó expuesto un corte de boletas en perjuicio de la candidatura presidencial de la boleta oficialista. Ocurrió en las provincias y, también, en el conurbano bonaerense, donde el intendente, en algunos casos, llegó a tener 20% más de votos que la categoría principal.

“No creo en la pillería. Fui intendente y entiendo la dinámica de relación que se da con el vecino. Al contrario, (los intendentes) trabajaron mucho y muy bien, y de hecho saqué más de 5 millones de votos, que son argentinos que confiaron en mí en un contexto difícil, con un gobierno que tuvo muchos problemas, algunos heredados y otros que no supo explicitar”.

En este contexto se dan los anuncios que hizo anoche el ministro de Economía, que se solapa la dimensión de la gestión con la campaña electoral. En concreto, Massa dijo que durante esta y la semana siguiente la actividad proselitista pasará a un segundo plano. “Estos diez días -empecé el lunes muy temprano, a pesar de que había terminado muy tarde- el Massa candidato no tiene lugar. Porque tiene que estar el Massa ministro ocupándose de resolver los problemas de la gente que quiere tener certeza en los precios, certeza en los pagos, saber qué aumento va a tener”, explicó.

El ministro advirtió que “las medidas difíciles ya se tomaron” y reveló que “el Fondo pedía el 100% de devaluación cuando inició la negociación hace tres meses. Arrancaron pidiendo 100% de devaluación, después se plantaron en una devaluación de exigencia del 60% y finalmente, el acuerdo al que arribamos y que va a generar que la semana que viene tengamos casi 8.000 millones de dólares de desembolso, cerró en una negociación del 20%”.

Massa junto a la titular del FMI, Kristalina Georgieva.

“Si el 20% metió toda esta incertidumbre, imagínese el 100%. Es importante remarcar que es lo que dice Bullrich que va a hacer el 10 de diciembre cuando dice que va a levantar el cepo: es una devaluación del 100%. Que entiendan cuál es el impacto de la economía”, manifestó Massa.

En concreto, el funcionario adelantó que “la semana que viene vamos a empezar a anunciar el tema de la suma fija como tema a discutir dentro del marco de la paritaria. Lo estoy charlando con Kelly Olmos (la ministra de Trabajo) y la CGT. Va a haber suma fija, habrá un esfuerzo adicional en asignaciones familiares, vamos a reforzar AUH. Vamos a mirar cómo va a ser el impacto en la canasta de jubilados”.

“Sabemos lo que le pasa a la gente y sabemos el daño que la devaluación hace en términos de certidumbre. Pero también tiene que saber (la gente) que al Fondo no lo traje yo, que este es un acuerdo que ni siquiera firmé yo como ministro y que hoy lo estamos rediscutiendo, cambiándole las condiciones, para que el daño que representa el Fondo no sea tan alto”, consideró.