PANDEMIA

Alberto Fernández firmará un decreto reglamentario que faculta a los gobernadores a aplicar restricciones nocturnas

No será un DNU ni tampoco obligatorio el cierre nocturno.

Luego de los cuestionamientos de algunos mandatarios, finalmente el presidente Alberto Fernández firmará este viernes un decreto reglamentario que no será obligatorio, pero instruye o faculta a los gobernadores y al jefe de Gobierno porteño a llevar adelante medidas preventivas en el horario nocturno cuando la curva de contagios pegue un salto pronunciado como sucede ahora.
 
Así lo confirmaron voceros presidenciales a minuouno.com. Y si bien la medida aún no está terminada, aclararon que no será un Decreto de Necesidad de Urgencia (DNU) sino un "decreto reglamentario" del artículo 4 de DNU 1033/2020 que estableció el Distanciamiento Social (DISPO) en todo el país hasta fin de enero.

Este viernes habrá un anuncio oficial a las 12, en conferencia de prensa entre el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; la secretaria de Salud, Carla Vizzotti; y el ministro de Turismo, Matías Lammens. Este portal pudo confirmar que el decreto establecerá dos principios a partir de los cuales los mandatarios podrán adoptar el cierre nocturno preventivo de comercios y limitar la circulación de personas.

Por un lado, el Ministerio de Salud nacional trabaja en definir un coeficiente de contagios de coronavirus cada 15 días. Los distritos que superen ese valor, que se comunicaría hoy, y además reporten más de 150 contagios por cada 100.000 habitantes estarán habilitados para aplicar restricciones nocturnas.

Las medidas preventivas no serán obligatorias, es decir, los gobernadores podrán o no instumentarlas, pero desde Presidencia se recomendará que sí se apliquen a fin de evitar un anticipo de la segunda ola de coronavirus, que se esperaba recién para abril pero todos temen lo peor: que se de mismo en enero y debe suspenderse la temporada de verano apenas arrancó, así como volver a paralizar la economía, lo último que pretende Fernández.

El horario que proponía Nación era cierre de bares, restaurantes y boliches de 23 a 06, así como la prohibición de circulación en la vía pública en esa hora; mientras que el transporte público quedaría limitado sólo para trabajadores esenciales durante la vigencia del cierre nocturno.

Tras las críticas de Mendoza, Córdoba, Neuquén, Río Negro, Tierra del Fuego, la Ciudad y algunos distritos de la Costa Atlántica, el Gobierno dará la autonomía a los mandatarios a definir el horario de cierre en sus respectivos distritos.