Tribunales

Cristina Caamaño denunció un sistema de escuchas ilegales

La interventora de la AFI fue a los Tribunales de Comodoro Py a presentarle un escrito al juez. Allí detalló que se almacenaron 105.000 escuchas de manera irregular.

La interventora de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Cristina Caamaño, denunció  tal como lo había anticipado semanas atrás, que durante el macrismo se almacenaron en el organismo de inteligencia 105.000 escuchas de manera irregular.

Caamaño llegó a los Tribunales de Comodoro Py 2002 para presentarle un escrito al juez Marcelo Martínez De Giorgi, quien quedó a cargo de la causa por espionaje ilegal que se tramitaba en Lomas de Zamora.

“Esta presentación fue una denuncia que hicimos en Lomas de Zamora en el 2020, pero nunca la requirieron ni la pidieron. Por lo tanto, como ahora la causa pasó a Comodoro Py, vengo a decirle al doctor Martínez De Giorgi que tenemos resguardados 105.000 archivos de audio que corresponden a distintas filtraciones y que no se destruyeron cuando fueron entregadas a la Justicia. Están dentro de un rack en la AFI, y en un sistema que creó la AFI macrista justamente para esto”, contó Caamaño al arribar a los Tribunales de Retiro.

La interventora de la AFI afirmó que, “además de no destruir estos 105.000 archivos”, que se supone que tienen un requerimiento judicial, con una resolución, Gustavo Arribas (exnúmero 1 de la Agencia) se convirtió prácticamente en juez porque “le pedía a la Justicia que le permitiera escuchar cuando tenía una sospecha”. Según la encargada de la ex-SIDE, la Justicia le daba la autorización y él (Arribas) le enviaba el pedido a la Dajudeco (Dirección de Asistencia Judicial en Delitos Complejos y Crimen Organizado).

Ante la consulta de los periodistas presentes sobre si este descubrimiento echa por tierra las afirmaciones sobre que solo se trataba de cuentapropistas, Caamaño fue contundente: “A mí me parece que todo echa por tierra el tema de los cuentapropistas. Acá lo que tenemos son un montón de escuchas que no se destruyeron y que las tenemos resguardadas”.

Hay audios que corresponden a la causa de Mario Segovia, en el Penal de Ezeiza, donde una celda fue cableada y de ahí se realizaban escuchas. La interventora de la ex-SIDE aseguró que también hay otras causas, pero aclaró que desde la AFI no van a escuchar los audios. Sin embargo, admitió que vieron algunas transcripciones.

La Corte y la AFI

Caamaño resaltó que las escuchas se entregaban online y explicó que, en el gobierno de

Cristina Fernández, cuando le sacaron las escuchas a la AFI, éstas pasaron al Ministerio Público Fiscal. Y que cuando asumió Mauricio Macri, el por entonces presidente se las dio a la Corte.

“Acá lo que se hizo fue un punto a punto: se le devolvió a la AFI las escuchas, y se las devuelve el gobierno por otro medio, punto a punto, con un enlace digital”, señaló Caamaño.

“Se supone que el juez, cuando hace una investigación, pide una escucha. Esa escucha podía ser escuchada por la AFI como auxiliar de la Justicia”, explicó la interventora, y añadió que ahora la AFI no es más “auxiliar” de la Justicia en contrapunto con lo que ocurría durante el macrismo.

El mecanismo

Caamaño remarcó que este mecanismo estuvo “obviamente” avalado por la Corte Suprema de Justicia de la Nación ya que la Dajudeco depende de ella. Y resaltó que el camino “estaba invertido”.

“Se supone que el juez le pide a la Dajudeco una escucha y después decide quién lo va a escuchar. Acá era al revés. La AFI le pedía al magistrado una escucha, este la autorizaba, la AFI se la pedía a la Dajudeco, escuchaba y analizaba”, remarcó la funcionaria a la que Alberto Fernández le encargó terminar con los sótanos de la democracia.

También explicó que “la AFI analizaba online más allá de los CD que le llegaban”. “Como siempre usaban CD. Acá había un punto a punto para poder escuchar prácticamente online”, añadió.

“¿Por qué cree que estuvo invertido?”, le preguntaron la Red 92 y el diario Hoy. “Porque en ese momento ellos lo manejaron de esa manera. Hay que preguntarle a Arribas por qué lo pidió así y de dónde venía la orden. Para mí, la orden tenía que venir del presidente”, finalizó Caamaño.

El Sidea

Cristina Caamaño le informó a Marcelo Martínez De Giorgi que, a comienzos de la intervención de la AFI, se halló un sistema informático denominado Sidea que recibía, a través un enlace digital punto a punto, interceptaciones telefónicas realizadas por la Dajudeco. El sistema ya había sido informado a la Justicia Federal de Lomas de Zamora, pero nunca fue requerido ni analizado.

En el Sistema de Administración (Sidea) es donde se encuentran almacenados alrededor de 105.000 registros (tanto los audios, como las transcripciones). Una pequeña cantidad del volumen total de información coincide con las transcripciones de conversaciones entre detenidos y sus defensores interceptadas de un pabellón del Complejo Penitenciario Federal I de Ezeiza.

La metodología fue denunciada incluso ante el relator de Naciones Unidas para la independencia de Magistrados y Abogados, Diego García Sayán, como parte de la investigación judicial contra Mario Segovia por narcotráfico.

A pedido de la AFI se interceptaron los teléfonos de un pabellón de Ezeiza. Así, se grabaron las conversaciones de otros detenidos (con sus defensores, por ejemplo), que nada tenían que ver con el objeto de esa causa. Y nunca se destruyeron. Esas transcripciones luego fueron publicadas en medios de comunicación con el objeto de “suavizar” el escándalo generado por el caso de Marcelo D’Alessio.