JUSTICIA

El Consejo de la Magistratura concretó su primer encuentro y fijó fecha de plenario

Fue para consensuar una agenda de prioridades y una dinámica de funcionamiento.

El Consejo de la Magistratura se reunió hoy por primera vez con su composición de veinte miembros y la presidencia a cargo del titular de la Corte Suprema, Horacio Rosatti, para consensuar una agenda de prioridades y una dinámica de funcionamiento.

La primera definición del Consejo fue fijar el próximo jueves 2 de junio, a las 9.30, como día de primer plenario ordinario que será transmitido públicamente a través de una plataforma virtual.

Según señalaron fuentes del Consejo, el clima de la reunión, que se extendió más de dos horas y media, fue de “cordialidad” entre los consejeros de la antigua gestión, los que asumieron a partir de mediados de abril y el presidente Rosatti.

Precisamente el titular de la Corte y el Consejo inició el encuentro agradeciendo a los trece consejeros que vienen de la composición anterior y en especial a los dos últimos presidentes del cuerpo, el académico Diego Molea y el juez Alberto Lugones, por haber encabezado el proceso de reestructuración del órgano que selecciona y remueve a los magistrados.

Rosatti y los diecinueve consejeros evaluaron también fechas para las pruebas de oposición en los concursos 480 para cubrir vacantes en el Tribunal Oral Federal de Jujuy y 481 que busca titular para el juzgado federal de Tartagal, Salta.

Otro de los aspectos que se analizaron, según informó oficialmente el Consejo, fueron la “fisonomía de las comisiones”, es decir, la vigencia de los mandatos de los presidentes y la composición que debe tener cada una.

Con la nueva integración, se deberán volver a elegir los miembros y autoridades de las comisiones de “Selección de magistrados y Escuela judicial”; “Disciplina”; “Acusación” y “De Administración y Financiera”.

El encuentro de los consejeros, en esta primera reunión de labor o “coordinación” como eligieron llamarla, se concretó en el primer piso de la sede del organismo, en Libertad al 700 –pleno distrito judicial porteño-, que fue acondicionado por directiva de Rosatti para albergar a los veinte miembros.

También por decisión del presidente de la Corte, la reunión fue a solas, sin asesores, aunque con la presencia del secretario del Consejo, Mariano Pérez Roller.

Al finalizar el encuentro, el Consejo emitió un comunicado en el que reafirmaron el “compromiso de continuar trabajando en agendas vinculadas a la transparencia y la perspectiva de género en materia judicial”.

Una de las hipótesis que se evaluaban antes de este primer encuentro era que hubiera alguna queja o reproche a Rosatti por el exiguo plazo de 120 días que fijó la Corte para adecuar el organismo y que complicó su vida interna.

Si bien tomaron la palabra todos los consejeros en distintos momentos del encuentro, no hubo la catarsis que se esperaba, ni siquiera del más crítico del proceso, el expresidente del Consejo Alberto Lugones.

La palabra elegida por las fuentes consultadas, y usada además en el comunicado oficial para caracterizar esta primera reunión, fue “cordialidad”, muy en la línea de los usos y costumbres en la justicia pero no tan habitual en los órganos colegiados de corte político como es el Consejo de la Magistratura.

En el horizonte inmediato, el nuevo consejo tiene que elegir las ternas de candidatos para cubrir tres vacantes en primera instancia de la justicia federal y dos en la Cámara Federal.

El trámite complejo que implica la selección de un candidato a magistrado está cumplido en estos casos y solo falta el acuerdo de los consejeros para elevar las ternas al Poder Ejecutivo.

Los intentos previos para alcanzar la mayoría fracasaron y ahora el nuevo Consejo tiene el desafío de alcanzar el quorum necesario de doce consejeros y lograr que dos tercios de los presentes voten favorablemente las ternas propuestas.

Según estiman en el Consejo, las ternas para cubrir las vacantes en los juzgados federales 6, 11 y 12, que conducían Rodolfo Canicoba Corral, Claudio Bonadio y Sergio Torres, no tendrán mayor inconveniente para conseguir el voto de los dos tercios de los consejeros.

En cambio, siguen en pugna las ternas para cubrir las dos vacantes de la Sala I Cámara Federal, que ocupan de manera provisoria Leopoldo Bruglia y Pablo Bertuzzi.