SALUD

El Gobierno analiza vacunar con una sola dosis a 20 millones de personas para marzo

Inicialmente preveía vacunar a 10 millones de personas para esa época con las dos dosis, pero ahora estudia un cambio de estrategia.

A tono con lo que evalúan por estas horas muchos países países alrededor del mundo el gobierno de Alberto Fernández analiza un cambio de estrategia en su campaña de vacunación masiva contra el coronavirus Covid-19 y podría apuntar a llegar a 20 millones de personas para marzo con una sola dosis en lugar de su idea inicial de contar con 10 millones de personas vacunadas con las dos dosis para esa época.

Así lo adelantó este lunes la secretaria de Acceso a la Salud de la Nación, Carla Vizzotti, en una entrevista que concedió a Página/12. "Tenemos que tener una mirada realmente amplia porque esta es una situación absolutamente inédita y las decisiones se tendrán que tomar en tiempo real y a medida que vayan surgiendo informaciones de otros países", señaló Vizzotti y abundó: "Los intervalos de interdosis de las vacunas son como mínimo de 21 días, pero si pasa más tiempo entre una y otra aplicación no es un problema relevante. La decisión sanitaria más importante que nos tenemos que plantear es si queremos tener 10 millones de personas vacunadas a marzo con dos dosis o si preferimos tener 20 millones de personas con una sola".

"En este contexto de pandemia es muy lógico pensar que se pueda vacunar a más gente con la primera y diferir la segunda para cuando ya esté controlado el brote" aventuró Vizzotti.

En ese sentido la secretaria de Acceso a la Salud confirmó que el nuevo pedido de vacunas a la Federación Rusa incluye una mayor cantidad de vacunas de primera dosis que de la segunda. "En el caso puntual de la Sputnik V se trata de dos componentes distintos y la segunda tanda de 300 mil que llegarán al país la próxima semana serán aplicados a los que se dieron la primera dosis. Pensando en eso, para la segunda entrega estamos pidiendo más dosis del componente uno y no estamos pidiendo exactamente mitad y mitad como hicimos ahora", explicó.

Acerca de la falta de acuerdo con Pfizer la funcionaria ratificó que el laboratorio impuso condiciones imposibles de aceptar para el país aunque aseguró que las negociaciones siguen adelante. "Las negociaciones con Pfizer se empezaron al mismo tiempo que con AstraZeneca, pero aún no se llegó a un acuerdo por cuestiones legales. Lo que pide la casa central de Pfizer, ubicada en Estados Unidos, son algunos criterios de indemnidad y de no responsabilidad del laboratorio que implicarían que el país tenga que responder con fondos ante cualquier situación. Esos son los puntos que todavía se están definiendo porque Argentina tiene un marco legal que cumplir. De todos modos, se está trabajando para tener esa u otras opciones" señaló Vizzotti a ese medio.

Aseguró además que las mutaciones que hay en todas las cepas que se lograron identificar hasta el momento "son mutaciones menores que no impactan en las vacunas" y minimizó esta situación. "La parte comunicacional de esta pandemia es muy interesante para analizar, porque cuando uno escucha en los medios la palabra 'mutación' parece el fin del mundo, pero es algo que pasa con todos los virus, dado que estos intentan evolucionar: el objetivo del virus no es matar a la persona sinoreplicarse, por eso las mutaciones, en general, los hacen más transmisibles y menos letales", explicó.

Y siguió: "En este marco, es muy importante la vigilancia epidemiológica, porque esto es dinámico y, si bien los virus pueden tener mutaciones pequeñas, también pueden tener mutaciones grandes y la situación se tornaría distinta. Hasta ahora lo que informó el Malbrán es que en Argentina solamente ha ingresado una cepa de Rio de Janeiro, por lo tanto no es algo que predomine. Hay algunas cepas que son más transmisibles que podrían tener que ver con lo que está pasando en Londres, pero no hay una cepa que esté predominando ahora en Argentina y que sea una mutación. Con cuidarnos más tendríamos que poder controlarlo".

Vizzotti reconoció además que detrás del fuerte aumento de casos positivos registrados en las últimas semanas existe un fuerte cansancio en la población que la llevó a relajar las precauciones.

"Los cuidados y las restricciones se están extremando en todas las partes del mundo. Sin embargo, comprendemos que la población se encuentra agotada y con una disminución de la percepción del riesgo que es muy preocupante. Eso es algo que no se puede no mirar. Sin embargo, no hay un solo responsable que pueda tomar una decisión. Cada uno tiene un rol y el desafío actual es cómo reformular la presentación del problema", dijo.